En la mayoría de los hogares, el presupuesto de fin de año alcanzará para enero, pero ante la escasez de recursos, será en febrero cuando se registre una mayor cantidad de visitantes en las casas de empeño, de acuerdo con Joel Rodríguez Navarro, director general de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre).

“En febrero esperamos que haya aumento del 10 al 15% en las operaciones prendarias dependiendo de la zona del país que se trate”, dijo Rodríguez Navarro en entrevista.

Asimismo, detalló que la industria espera principalmente el empeño de aparatos eléctricos, electrónicos y electrodomésticos, que son el tipo de bienes que la mayoría de población lleva a empeñar desde hace unos 8 años.

“Hasta el 2015, la prenda más utilizada (para empeñar) era la alhaja con contenido de oro. Pero hoy, en el 76% de los casos son eléctricos, electrónicos y electrodomésticos”, comentó el líder de la mayor agrupación de casas de empeño localizadas en el país, que conjunta 4 mil establecimientos.

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Empeñar para mejorar los bienes

De acuerdo con Rodríguez Navarro, aunque 8 de cada 10 clientes de las casas de empeño recuperan sus prendas cuando recurren a casas de empeño correctamente establecidas, siempre existe la posibilidad de aprovechar la operación prendaria para mejorar los bienes.

“Hay mucha gente conoce tan bien el ambiente de la industria prendaria que utiliza el servicio para mejorar la tecnología de su casa, para cambiarla, para renovarla”, explicó.

“Voy a la casa de empeño, llevo mi teléfono generación 4, lo dejo empeñado y pongo una pequeña diferencia y adquiero un generación 5 o 6, con la garantía de hacer el cambio en una empresa formal”.

El representante del gremio recomendó que al hacer un empeño, los interesados verifiquen que el establecimiento al que acudan esté inscrito en el Registro Público de Casas de Empeño, creado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), lo cual garantiza que la institución prendaria realizará su labor sin abusar del cliente.

Asimismo, sugirió a los pignorantes ubicar el distintivo Amespre, con lo que “pueden estar seguros de que se trata de una sucursal que es formal, y cumple con el amplio marco jurídico que regula a las instituciones prendarias”.

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