El mandatario mexicano dijo que Obama se comprometió personalmente a investigar las presuntas acusaciones de espionaje de la NSA para que el asunto no dañe las relaciones con el principal socio comercial de Estados Unidos en América Latina.   Reuters     El presidente Barack Obama prometió investigar reportes de que Estados Unidos espió a los líderes de  México y Brasil, denuncias que tensaron la relación de Washington con sus dos más grandes aliados en América Latina. Obama se reunió con el presidente  Enrique Peña Nieto y su homóloga brasileña durante una cumbre del Grupo de los 20 en Rusia y discutió con ellos reportes de que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por su sigla en inglés) espió sus correos, llamadas y mensajes. “Les aseguré que voy a tomar estas acusaciones muy seriamente, que entiendo sus preocupaciones, entiendo las preocupaciones de los mexicanos y brasileños y vamos a trabajar con ellos para resolver lo que es una fuente de tensión”, dijo Obama en una conferencia de prensa en San Petersburgo. Rousseff había comentado, también el viernes, que no estaba completamente satisfecha con las garantías ofrecidas por Obama durante su reunión del jueves. La mandataria dijo que Obama se había comprometido a enviar para el miércoles una explicación sobre el reporte de espionaje, y que la visita que tiene programada para el próximo mes a la Casa Blanca se decidiría en parte dependiendo de la respuesta estadounidense. “Mi viaje a Washington depende de las condiciones políticas que genere el presidente Obama”, expresó Rousseff a medios antes de dejar Rusia. Peña Nieto dijo a su vez que Obama se comprometió personalmente a investigar las presuntas acusaciones de espionaje de la NSA para que el asunto no dañe las relaciones con el principal socio comercial de Estados Unidos en América Latina. Un programa de noticias brasileño reportó que la NSA espió correos electrónicos, llamadas telefónicas y mensajes de texto de Rousseff y de Peña Nieto, cuando éste aún era candidato a la presidencia. El informe, de la cadena Globo TV, se basó en documentos filtrados por el fugitivo ex contratista de la NSA Edward Snowden, actualmente con asilo en Rusia. Rousseff se puso furiosa y su Gobierno ha exigido una explicación completa, argumentando que las preocupaciones por la seguridad informática o la lucha contra el terrorismo no explican por qué la NSA tendría que espiar las comunicaciones de Rousseff con sus principales asesores. Brasil ha sido un aliado democrático de Estados Unidos por décadas dentro de Sudamérica y no es un refugio de terroristas. Brasilia incluso canceló el viaje de un equipo inicial a Washington que prepararía su visita del mes próximo. Obama insistió en que la tensión por las revelaciones de las actividades de espionaje de la NSA no debería invalidar la amplia relación que Estados Unidos tiene con Brasil, al cual se refirió como un “país increíblemente importante” y una “asombrosa historia de éxito”.   Revisión del programa   El presidente dijo que la misión de la NSA era reunir información que no estuviese disponible en fuentes públicas, tal como lo hacen los servicios de inteligencia de otras naciones que rastrean amenazas de terrorismo, sólo que la agencia estadounidense tenía una capacidad mucho mayor para compilar información. Obama reconoció que el Gobierno de Estados Unidos tenía que “dar un paso atrás y revisar lo que estamos haciendo”, y también considerar los costos y beneficios de la información, considerando los legítimos temores por la privacidad y las libertades civiles. La visita de Estado formal de Rousseff a Washington está programada para el 23 de octubre. Entre los temas que revisaría con Obama está la posible compra de aviones de guerra por 4,000 millones de dólares, cooperación en tecnología de petróleo y biocombustibles y otros acuerdos comerciales. La visita tenía como meta consolidar un reciente progreso en la relación entre las dos economías más grandes de América y destacar a Brasil como potencia regional emergente.

 

Siguientes artículos

Demandan a Verizon por adquisición de Vodafone
Por

La compañía dueña del otro 55% del negocio, acordó pagar a Vodafone 59,000 millones de dólares en efectivo y 60,000 mill...