En 2019 en Brumunddal, Noruega, fue inaugurado el Mjøstårnet, un edificio de 18 pisos hecho de madera. En ese momento era considerado el edificio más grande del mundo hecho con este material y destacaba que se situaba a orillas del lago Mjøsa, en Brumunddal, Noruega, pero entonces se construyó el Ascent.
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El mundo ahora tiene un nuevo líder y está en Milwaukee, Wisconsin, Estados Unidos. Se trata del Ascent que se inauguró a finales de julio pasado. Esta imponente construcción cuenta con 25 pisos y en total mide 86.6 metros de altura.
El concepto fue diseñado por el estudio Korb+Associates Architecs y es hasta ahora considerado el rascacielos más alto hecho de madera. Su construcción tardó poco menos de dos años y el diseño del estudio se basó en el diseño biofílico, una tendencia que se caracteriza por insertar aspectos de la naturaleza en la construcción de edificios en el diseño de interiores que ayude a reconectar a los ciudadanos con la naturaleza.
El edificio Ascent alberga 259 departamentos, estacionamiento, una piscina, sauna, gimnasio, tiendas y otras comodidades para los habitantes del inmueble. Es un claro ejemplo de como el lujo se encuentra con la sostenibilidad y la comodidad.
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Lo que hace sorprendente al Ascent es que estamos acostumbrados a que este tipo de alturas en grandes edificaciones contemplen enormes vigas de acero y cantidades enormes de hormigón,
Ascent, en efecto, cuenta con una base de hormigón y el estacionamiento, para ser más estable, tiene una estructura de acero, pero en los restantes 19 pisos observamos claramente como cambian el esquema tradicional de la industria de la construcción por glulam y madera contralaminada —considerado un material de construcción idóneo para un futuro sostenible—.
De acuerdo con Council on Tall Buildings and Urban Habitat (CTBUH), el uso de madera en masa para el sistema estructural ayudó a que se redujera el tiempo de construcción en aproximadamente 25% con comparación con un edificio de hormigón de construcción convencional de la misma escala.
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Además, la estructura de madera del Ascent se puede admirar, ya que está expuesta y forma parte del diseño interior y exterior.
Desde el punto de vista de la ingeniería y diseño, el Ascent llegó para romper con muchos mitos de la construcción; si bien no es la primera vez que se construye con madera, sí nos muestra que los grandes edificios en las urbes pueden ser sostenibles e incluso que podría ser el futuro en las grandes edificaciones del mundo.
