La pausa obligada por la pandemia abrió una nueva era para los hogares, que, después de permanecer en el letargo, se han convertido en punto neurálgico de nuestro día a día. Más allá de su funcionalidad, los muebles y los objetos nos vinculan con lo tangible en la extraña y virtual realidad que vivimos: nos abrazan, nos generan emociones y, además, los hacemos partícipes de incontables historias. Cabe, entonces, reflexionar sobre las memorias que guardan y el diálogo que se genera alrededor de su diseño.

La conversación es extensa porque abarca diferentes conceptos. Sin embargo, en el contexto actual, la colaboración y la solidaridad abanderan movimientos destinados a impulsar el desarrollo social y económico de México a través del diseño, como nunca se había visto.

Foto. Ensamble Artesano

Ensamble Artesano es un ejemplo de esa energía a favor del bien común. La iniciativa busca promover la creación artesanal y el reconocimiento al valor de este trabajo por medio de vínculos horizontales, con el fin de garantizar ingresos a las comunidades afectadas por el confinamiento.

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Sumarse a esta plataforma ha significado mucho para el diseñador Raúl de la Cerda. Al observar los bordados realizados a mano por mujeres de las comunidades aledañas a Valle de Bravo, él confirmó que la paciencia es una gran virtud. Así, aprendió a hacer hilos y sintió la honestidad implícita en los detalles.

Raúl de la Cerda reconocido como World Youth Designer 2019, por la Guangzhou Design Week en China. Foto. Roxana Vermell.

Él aportó, con sutileza, su mirada contemporánea en cuanto a composiciones visuales y colores. “Toda la comunicación se hizo de manera digital y, a pesar de eso, logramos una conexión trascendente. También fue un ejercicio para empoderar a las comunidades, porque, con la tecnología, su labor artesanal puede tener un mayor alcance”, explica quien en 2019 se convirtió en el primer latinoamericano nombrado como World Youth Designer, por la Guangzhou Design Week en China.

Revaluar el papel del diseño en una nueva realidad ha llevado a Raúl a centrar su inspiración en aquellas personas que, sin importar la situación en la que se encuentren, no pierden la capacidad de asombro. También hace énfasis en el respeto al origen de los materiales y su esencia para crear objetos de largo aliento.

Colección Antroplogía. Foto. Mariana Achach.

FORMA Y FONDO

“El diseño significa una gran oportunidad para que, desde la creatividad, podamos redefinir nuestro presente y futuro”, responde Rodrigo Escobedo, uno de los fundadores de La Metropolitana. La fuerza de esta afirmación empujó a este estudio a establecer una serie de estrategias para el mantenimiento de sus redes de trabajo y apoyar a quienes quedaron en desventaja frente a la contingencia.

Cuando comenzó la pandemia, relata, se instaló un albergue seguro, donde un grupo de colaboradores decidió ejercer una cuarentena productiva. Desde entonces, el equipo se ha dedicado a fabricar diversos objetos, y la utilidad obtenida por la venta de esos productos se ha destinado en su totalidad a cubrir las necesidades de alimentación de quienes más lo necesitan.

Fundadores de La Metropolitana: Alejandro Gutiérrez, Mauricio Guerrero y Rodrígo Escobedo.

De manera paralela, el despacho fundó un taller de montaje en Xocotla, Veracruz, para que sus colaboradores no tuvieran que trasladarse a la Ciudad de México. El objetivo es claro y apunta a crear más células en distintos puntos del país.

“Ambas iniciativas ya están totalmente integradas a nuestro modelo y son parte medular de nuestra propuesta social”, precisa Rodrigo, y subraya que la empatía es clave para hacer frente a cualquier adversidad. La Metropolitana ha logrado abordar cada proyecto con sensibilidad e ingenio.

Diseño
“El diseño significa una gran oportunidad para que, desde la creatividad, podamos redefinir nuestro presente y futuro”: Rodrigo Escobedo, La Metropolitana.

El despacho ha colaborado con el chef René Redzepi y otros cocineros reconocidos a escala nacional e internacional. Que sus colecciones formen parte de aquellos momentos entrañables vividos en el hogar, es una de sus grandes pasiones.

COEXISTENCIA

Paulina Herrera, fundadora de la firma Pérch, concluye que el diseño mexicano está transitando actualmente por una realidad transformadora y propicia para crear piezas funcionales que, con su estética, transmitan paz. La armonía de los espacios, muebles y objetos, argumenta, es sinónimo de bienestar y un lujo que se decanta a través de las emociones.

Paulina Herrera, fundadora de Pérch. Foto. Laura May.

Los trazos depurados y afinados de la marca son un canon que equilibra el funcionalismo contemporáneo con una filosofía de respeto por el entorno y la comunidad, pues utiliza materia prima de productores locales, para crear empleos remunerados con justicia, con el objetivo de contribuir al desarrollo sostenible del país.

Cada una de las piezas que han sido concebidas por los creativos es trabajada por expertos ebanistas mexicanos, quienes resaltan la nobleza y la versatilidad del nogal y del rosamorado, con lo cual dan vida a esculturales siluetas y ensambles que incorporan maderas en diferentes tonos, como un detalle que acentúa con gran altura tanto su fortaleza como su precisión técnica.

La armonía de los espacios, muebles y objetos, argumenta, es sinónimo de bienestar. Foto. Pérch.

Texto originalmente publicado en la edición print de Forbes México. Octubre 2020.

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