México, en la mira de Conservation International

A lo largo de 31 años de operaciones, Conservation International (Conservación Internacional, en México) ha trabajado alrededor del mundo a favor de la protección y la conservación de la naturaleza, de sus ecosistemas y de la biodiversidad, elementos esenciales para el desarrollo y la trascendencia del ser humano. Durante su reciente visita a la Ciudad de México, conversamos con Jennifer Morris, presidenta de Conservation International, acerca de las actividades de esta organización, la cual opera en México desde hace 27 años. “Conservation International nació con una idea simple, que era trabajar a favor de la conservación de la naturaleza en tiempos de la biodiversidad, de una manera diferentes a lo que se estaba haciendo en ese entonces en Estados Unidos. Y es que la solución no era cerrar espacios y crear parques nacionales. Eso es una visión a corto plazo. Más allá de pensar en dejar a la gente afuera de estos espacios protegidos, había que pensar en involucrar a la comunidad con incentivos como la creación de empleos, de tal forma que se sumaran a las iniciativas por convicción”, señaló la presidenta de la organización. Por otra parte, indicó que la organización se fundó por biólogos que querían realizar trabajo de conservación de forma diferente, fomentando los incentivos económicos en las zonas aledañas a los espacios En ese sentido, siempre ha buscado que sus propuestas e intervenciones tengan sustento científico, lo cual ha ayudado al posicionamiento de la organización en diferentes partes del mundo. “Actualmente tenemos proyectos en cerca de 30 países, y nuestro enfoque sigue girando en torno al trabajo con las comunidades locales, involucrando también a los sectores público y privado. Algo que mucha gente desconoce es que proteger a la naturaleza resolvería el 30 por ciento de la problemática en torno al cambio climático. No lo digo, yo, sino estudios que se han realizado, así que todavía hay mucho camino por recorrer”, agregó Jennifer Morris. Le gustaría que la organización siguiera posicionándose en el mundo, sin que eso necesariamente implique crecer en cuanto a staff y oficinas. “Más bien, quiero cada vez más las comunidades, las empresas y los gobiernos nos vean como asesores y especialistas ante situaciones medioambientales, que seamos a los primeros a los que llaman y acuden. Y es que nuestro trabajo se basa en datos y en ciencia, lo cual suma mucho valor y credibilidad, además de que se logra un impacto mayor.  Lo que hemos logrado es fenomenal, pero hay mucho más por hacer”, aseveró. Te puede interesar: Rocky Mountaineer, el tren de lujo que te va a conquistar Jennifer Morris comentó que hay algunos países de los cuales ya salió la organización porque los proyectos maduraron lo suficiente como para dejarlos en manos de organizaciones locales, lo cual demuestra que su metodología funciona y empodera a las comunidades locales. Sin embargo, todavía hay lugares de Africa, Asia y América Latina a los que les falta llegar. En México hay tres proyectos en marcha (agricultura sostenible, suministro de agua y salud de los océanos). A pregunta expresa sobre lo que podemos hacer como individuos para apoyar a la naturaleza, mencionó que las personas deben pensar en lo que consumen y reducir su consumo de carne roja, ya que las vacas son uno de los principales motivos de la deforestación en el mundo, sobre todo en  las zonas tropicales. “No digo que la gente deje de consumir carne roja, simplemente que reduzca su consumo. No tienen que comerla todos los días. Así mismo, es importante preguntar de dónde viene lo que consumimos y de qué forma se obtuvo. Es un hecho que en muchas tiendas y restaurantes no tendrán las respuestas, pero si más y más gente hace este tipo de preguntas, los negocios van a empezar a cuestionar de dónde y cómo obtienen sus productos. El cambio inicia con este tipo de cuestionamientos”, puntualizó. Síguenos en: Twitter Facebook Instagram Suscríbete a nuestro newsletter semanal aquí