La firma de arquitectos con base en las ciudades de San Francisco y Oslo, Mork-Ulnes, ha sorprendido a todos con uno de sus más recientes proyectos: The Mylla Hose, una pequeña casa ubicada en la cima de una colina en Oslo cuyo aspecto cambia con el paso de las estaciones.
El sorprendente diseño, que se destaca del paisaje de pinos nevados, fue un proyecto realizado con el concepto “hytte”, que procura refugios pequeños y básicos con habitaciones compactas, ello a petición de un geólogo estadounidense que se mudó a la capital noruega por trabajo.
En el requerimiento de la familia se contemplaba tres habitaciones, incluyendo una con literas para los niños, dos baño con espacio eficiente, un pequeño añejo para guardar y mantener equipo al aire libre y un sauna para dos personas. Así fue como el prestigioso despacho de arquitectos puso en práctica su imaginación para materializar este proyecto.
Una de las características que más ha llamado la atención es, sin duda, la capacidad de envejecer de la casa. Las planchas de corazón de pino sin tratar utilizadas por los arquitectos hacen que con el paso de las estaciones, que van de inviernos nevados a veranos cálidos, tornen grises sus capas.
Y no solo eso: el diseño de cada aprovecha las distintas vistas de su ubicación; a un costado se puede observar el Lago Mylla, la habitación de invitados se abre a la ladera, y la de los niños al cielo expansivo. El dormitorio principal, en tanto, conserva una vista privada del bosque.
El edificio de 84 metros cuadrados también destaca por la peculiar forma de su techo, diseñado para evitar la acumulación de nieve y para atrapar los rayos del sol, creando distintas tonalidades en cada una de las habitaciones. Este tipo de construcciones hytte son comunes en el campo para los noruegos, quienes buscan evocar las cualidades simples y utilitarias incorporando comodidades modernas, creando espacios generosos.
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