Ángeles Béjar, la madre de Luis Rubiales, apartado temporalmente como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ha puesto fin al encierro y huelga de hambre que inició para pedir justicia para su hijo, tras ser traslada ayer a un hospital y ser dada de alta horas después.
Así lo indicó el párroco de la iglesia de la Divina Pastoral, donde Ángeles Béjar mantuvo la protesta durante dos días y medio.
Ángeles Bejar, cuyo paradero no ha sido facilitado, evoluciona de forma favorable tras responder de forma satisfactoria al tratamiento realizado en el hospital Santa Ana de Motril donde fue trasladada.
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Madre de Rubiales se recupera tras ser llevada al hospital
Presentaba un importante hinchazón en las piernas, que pudo haberse ocasionado por la acumulación de líquidos, además de vómitos, mareos, angustia y un fuerte malestar físico que ha motivado que el médico que la trató en la iglesia donde secundaba el encierro recomendara el traslado al centro sanitario.
La madre de Rubiales abandonó el servicio de urgencias del hospital pasadas las 23:30 horas de este miércoles acompañada de su hijo.
Ángeles Béjar tenía previsto realizar una comparecencia ante los medios de comunicación cuando se le presentó el problema físico por lo que quince minutos después ha salido el párroco.
Por otra parte para mañana a las 19:00 horas se convocó en la plaza de la Aurora de Motril (Granada) una concentración por parte de diferentes asociaciones sociales y de mujeres de Granada en apoyo a la jugadora de la selección absoluta de fútbol Jenni Hermoso, a la que Rubiales besó en la boca durante la entrega de medallas del mundial de fútbol femenino.
Con información de EFE