El director general de Grupo Financiero Banorte, Marcos Ramírez Miguel, consideró, pese al fenómeno inflacionario y el ciclo alcista del Banxico, la economía de México continuará creciendo, incluso si Estados Unidos entra en una recesión, debido a los beneficios del nearshoring, con el cual empresas buscan relocalizarse en el país.

En conferencia de prensa, el directivo comentó que el avance del Producto Interno Bruto (PIB) podría darse incluso si la economía estadounidense presenta una ligera desaceleración y se presenta una política monetaria más restrictiva del Banco de México (Banxico).

“Hay una reactivación sostenida en la demanda de crédito. El Producto Interno Bruto está listo para extender su recuperación en lo que resta del año y creemos que podemos crecer 2.1%, a pesar de la desaceleración de la economía estadounidense, las presiones inflacionarias y un mayor endurecimiento a las políticas monetarias”, comentó el directivo en conferencia de prensa.

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En este sentido, señaló que si bien existen temores sobre una posible recesión en Estados Unidos, en caso  de darse este escenario, se compensaría con los beneficios que traería el nearshoring, que haría crecer las exportaciones un 10%.

De hecho, el directivo comentó que hasta ahora no ven afectaciones en los créditos por el alza en la tasa referencial de Banxico, que hasta el cierre de junio se ubicó en 7.75%, lo cual tampoco ha afectado las líneas de crédito con sus clientes.

Asimismo, Marcos Ramírez expuso que pese el incremento en la tasa de referencia del Banco de México para contener la elevada inflación, están conteniendo el ajuste en el costo de sus productos de crédito.

“Estamos aguantando bastante y estamos absorbiendo mucho de la subida de las tasas de referencia en nuestros productos. Así está la competencia, somos 50 bancos en México compitiendo ferozmente y tenemos nuevas tecnologías que nos hacen abaratar un poco los productos y esto está haciendo que no se pase totalmente a los productos el incremento de las tasas de referencia”, dijo el directivo de Banorte.

Resaltó que no se prevén aumentos significativos en la morosidad ante el contexto de inflación que existe en México ni tampoco en el comportamiento del crédito, ya que por el momento se tiene un estimado de cuál será el pico del alza de precios.

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Al cierre del segundo trimestre del año, Grupo Financiero Banorte reportó una utilidad neta de 11 mil 524 millones de pesos; un incremento de 34% respecto del mismo periodo de 2021.

También reportó un crecimiento anual de 8% en su cartera de crédito, a 860,766 millones de pesos, impulsada por una sólida reactivación en la demanda de sus productos, a pesar del entorno macroeconómico desafiante.

La institución financiera precisó que su cartera de Consumo, que refleja el financiamiento a las familias mexicanas, ascendió a 339,031 millones de pesos, un incremento de 8% respecto al mismo periodo del año anterior.

A su vez, el Hipotecario presentó un crecimiento de 6%, al ascender a 207,524 millones de pesos y el Automotriz se incrementó 3%, con un saldo de 28,872 millones de pesos; el de Nómina sumó 61,591 millones de pesos, un incremento de 14%; la colocación a través de Tarjeta de Crédito se ubicó en 41,044 millones de pesos, un crecimiento de 11% anual. 

La cartera de Crédito Comercial de Banorte alcanzó los 207,275 millones de pesos, lo que representa un incremento anual de 7%; la Corporativa se situó en 148,027 millones de pesos, un avance de 12% y la Cartera de Gobierno alcanzó los 166,433 millones de pesos, un aumento de 8%.

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