A más de un año de haber comenzado la epidemia de Covid-19, innumerables cantidades de negocios se han perdido y otros tantos se han tenido que reinventar, tal es el caso de la industria inmobiliaria, que, desde mediados de 2020, el 90 por ciento de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) cerraron sus oficinas como una medida de prevención.
Durante la cuarentena, millones de trabajadores en todo el mundo dejaron de asistir a sus oficinas, incluso muchas de ellas se vaciaron por completo. Ya no se encienden las luces por la mañana, ni los elevadores suben y bajan con tanta frecuencia y las computadoras u ordenadores, han pasado a ser parte de oficinas improvisadas desde el hogar.
Es en este contexto, que el Business Leader de Grupo Dags y desarrollador inmobiliario, Gus Marcos, señaló la importancia de modificar los conjuntos habitacionales y enfocarlos hacia una nueva etapa en la que se pueda trabajar de manera más cómoda y remota.
“Generalmente un desarrollo tiene un 10 a 12 por ciento de amenidades. Nosotros tuvimos la oportunidad y la ideología de dar ese valor agregado y de hacer crecer nuestras amenidades, hasta un 20 por ciento en los proyectos inmobiliarios verticales”, explicó.
Como desarrollador inmobiliario, mencionó Gus Marcos, se hicieron modificaciones importantes en los cuatro proyectos que ya estaban en ejecución (Localital, Livo, Tramontana y Bodegas del Norte), y dijo que estos cambios dan mucha certeza y credibilidad tanto al inversionista como al usuario final para que ellos realmente puedan utilizar estas amenidades.
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En cuanto al tema del trabajo, destacó que sus proyectos inmobiliarios, cuentan con oficinas de coworking o trabajo cooperativo, que básicamente permite a profesionistas independientes, emprendedores y pyme, compartir un mismo espacio de trabajo para desarrollar sus proyectos.
Cada edificio cuenta con cabinas privadas para que puedan realizar sus llamadas, además de la conectividad y su espacio de alberca, área de asadores, asoleadero, entre otros aspectos.
“(Lo anterior) son algunos de los cambios, de los cuales todos los proyectos agregar valor, como el espacio al aire libre, espacios en áreas cerradas y cualquier detalle irlo mejorando. Ese es nuestro compromiso como desarrolladores para el bien de la comunidad y nuestros inversionistas”, concluyó Gus Marcos.
Otro ejemplo de renovación inmobiliaria ha sido el caso de Quiero Casa, la cual, según su director de innovación y transformación, Mateo Turanzas, las ventas online de la firma se han incrementado durante la contingencia, al registrar un promedio mensual de visitas de 35,000 usuarios.
“El Covid-19 está acelerando su transformación digital para evitar sucumbir y cumplir las expectativas del mercado; anticipando así la curva de adopción de herramientas que optimicen sus canales digitales de venta y marketplaces”, dijo.
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