Ante la evolución del mundo y las tecnologías, los directivos mexicanos espera que para el 2025 el 45% de los ingresos de sus compañías provendrán de negocios en industrias o ecosistemas digitales en los que no operan actualmente.
De acuerdo con el estudio de “Liderazgo Global TCS 2021: Dónde, cómo y con qué competirán los líderes en la Nueva Década”, el 53% de los consultados dijo que su compañía sigue evaluando la competencia utilizando los límites históricos de la industria, en lugar de utilizar “ecosistemas” interindustriales que tengan en cuenta la competencia digital.
Sin embargo, más del 70% de los ejecutivos creen que la competencia más formidable hasta 2025 vendrá fuera de estos límites; de hecho, creen que el marketing digital es el área más importante para mejorar el uso de los datos, mientras que en análisis financiero en tiempo real tendrá un mayor impacto en la firma.
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El estudio de la firma destaca que, en comparación con la encuesta global, las empresas mexicanas obtienen la innovación a partir de los empleados de primera línea en un 42% contra 33% a nivel mundial y de los proveedores en un 30% contra 23%, mientras que de los clientes en un 32% contra 37% .
Además, prevén que los ingresos naturalmente digitales aumentarán al 64% para 2025, en comparación con el 46% de todas las encuestas.
También, las empresas mexicanas superaron la sostenibilidad ambiental y la transparencia como factores culturales clave.
A nivel global, el 39% de los más de 1,200 ejecutivos consultados dijeron que los ingresos de sus empresas el año pasado provinieron de productos o servicios puramente digitales, pero para 2025 espera que sean un promedio del 46% de los ingresos.
De cara al futuro, los encuestados esperan que la colaboración aumente o al menos se mantenga en todas las industrias y regiones, de hecho, el 42% de las empresas dijeron que esperan trabajar más con los competidores, mientras que el 46% dijo que no planean muchos cambios y el 12% que reducirán la colaboración.
Los hallazgos del estudio sugieren que, si bien los CEO continúan enfocándose en el desempeño comercial general, están evolucionando desde una visión de túnel en torno a la entrega de valor para los accionistas a una organización más centrada en el cliente y el empleado, y con buenas razones.
Y es que descubrieron que sus principales fuentes de innovación digital procedían de los empleados y los clientes, además identificaron una economía digital acelerada en el horizonte, pero pocos se están preparando para innovar.
