La organización civil Común en Común denunció que las entidades federativas podrían generar un subregistro en las cifras de delitos de alto impacto, como homicidio, feminicidio, extorsión, entre otros.
La investigación del grupo estudió anomalías en las cifras que presentó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) entre diciembre de 2018 y agosto de este año.
Belem Barrera, investigadora de dicho organismo, explicó que los comportamientos atípicos en las cifras pudieron ser por delitos que no se denunciaron, porque las autoridades manipularon u ocultaron las cifras, o por un error.
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Señaló que las principales anomalías que encontraron fue que los estados reportaron un número muy reducido de delitos, las caídas drásticas en las cifras, la duplicación de número, las posibles reclasificaciones de los delitos graves como leves, así como incongruencias entre el SESNSP y el gabinete de seguridad.
Señaló que en el periodo de estudio, Baja California Sur reportó cuatro feminicidios, y que de enero de 2015 a septiembre de 2019 no presentó un caso de este tipo.
En Tlaxcala fue algo similar, ya que además de presentar cuatro feminicidios, entre enero de 2015 y julio de 2017 tampoco reportó asesinatos de esta clase.
Sobre extorsiones, Michoacán develó 15 actos de esta clase, Tlaxcala tres y Nayarit ninguno entre abril de 2019 y abril de 2020. Sin embargo, la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) en 2018 mostró otras cifras:
Michoacán reportó 193, 923 casos de este tipo, en Tlaxcala 103, 061 y en Nayarit 44, 197.
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Barrera González abundó que el robo de vehículo con violencia no se reportó en Colima y Yucatán, a pesar de que las tasas de otros delitos fueron altas. Además, Tlaxcala indicó sobre 25 situaciones de violencia familiar, lo cual representa el 1% de los casos que tuvo Yucatán.
Apuntó que en los primeros ocho meses de 2019 algunas entidades reportaron una reducción del 50% en cierto delitos, como el caso de Colima, quien reportó 80% menos robo con violencia.
Para el caso de los registros consecutivos, refirió sobre Morelos, puesto que registró 10 casos de secuestro cada mes de manera consecutiva entre diciembre de 2018 y febrero de 2019.
En ese mismo sentido, dijo que Coahuila presentó 47 carpetas de investigación por robo con violencia en marzo de 2019 y en el mismo mes del 2020; Michoacán registró 1,780 robos de vehículo con violencia entre enero y agosto de 2019, así como en el mismo periodo del año siguiente.
Aunado a ello, aseveró que el SESNSP reportó una cifra 24% más alta en el número de asesinatos de diciembre de 2018 a agosto de 2020, en comparación con lo presentado por el gabinete de seguridad.
Ante ello, las propuestas de la organización son detener la militarización de la seguridad pública; fortalecer a las policías y fiscalías locales; capacitar a los servidores públicos que realizan la estadística; así como establecer mecanismo de vigilancia para evitar cifras “maquilladas” o incompletas.
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La investigadora resaltó el sistema Cosmos que utiliza el estado de Querétaro, donde los policías que tiene el primer contacto con la víctima comienzan el proceso de denuncia por medio de una tableta electrónica.
Añadió que por este modelo se han levantado el 31% de las denuncias en la entidad, lo cual facilitará el proceso para las personas que sufren el delito, al evitarles el traslado a la fiscalía, además que se desahogaría la carga de trabajo para estos centros de justicia.
A pesar de ello, insistió en que es necesario estudiar y encontrar otras formas que incentiven a la denuncia ciudadana.
