Por Maggie McGrath Greta Thunberg no es tu típica figura en el ranking de las Mujeres Más Poderosas de Forbes. Ella no es una funcionaria electa, como la canciller alemana Angela Merkel. No es CEO ni fundadora de una compañía, como Susan y Anne Wojcicki (de YouTube y 23andMe, respectivamente). Y tampoco es una presencia permanente en una de las listas de riqueza de Forbes, como el pilar principal de Forbes 400, Oprah Winfrey o la estrella de Celeb 100, Taylor Swift. Qué es Thunberg: influyente en formas en que las personas de tres y cuatro veces su edad no lo son. La joven de 16 años comenzó a aparecer en los titulares en su país de origen, Suecia, cuando en agosto de 2018 empezó a boicotear la escuela los viernes; en vez de asistir, se pararía afuera del Parlamento con un cartel que decía “skolstrejk för klimatet” o “huelga escolar por el clima”. Más tarde ese año, captó la atención internacional con su discurso en una conferencia de la ONU para el cambio climático. “Dicen que aman a tus hijos por encima de todo y, sin embargo, están robando su futuro frente a sus propios ojos”, dijo en ese momento. “Hemos venido aquí para hacerles saber que se avecinan cambios, les gusten o no. El verdadero poder pertenece al pueblo.” Lee también: Trump se burla de Greta Thunberg: ‘debe trabajar en su problema de manejo de ira’ Y pertenece particularmente a los jóvenes, muchos de los cuales han tomado en serio las palabras de Thunberg. El 20 de septiembre de 2019, estudiantes de todo el mundo organizaron la protesta de cambio climático más grande de la historia, con unos cuatro millones de personas participando en 2.500 eventos en más de 160 países, en los siete continentes. Y después de evitar los viajes aéreos por sus efectos sobre el medio ambiente (en Europa, Thunberg toma el tren, y para cruzar el Océano Atlántico en otoño, navegó por mar), los expertos en aviación han comenzado a citar “el efecto Greta” al buscar explicar un ligero descenso en los viajeros aéreos. Cada año, la lista de Forbes de las 100 Mujeres más Poderosas da prioridad a las mujeres que tienen un flujo de ingresos, producto interno bruto, o activos bajo administración a su disposición. La metodología considera la población que lidera una mujer, o el recuento total de empleados. Thunberg no tiene ninguna de estas cosas, pero sí tiene su voz. Y esa voz la ayudó a dominar la tercera y última pieza de nuestra metodología: las menciones de los medios. Este año, Thunberg tuvo más recortes de prensa únicos que todas las demás mujeres en la lista de poder, salvo dos: Merkel y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Thunberg ejerce un poder suave tan eficaz que fue finalista este 2019 para el Premio Nobel de la Paz, convirtiéndola en una de las nominadas más jóvenes para el honor. Lee: La activista Greta Thunberg, la Persona del Año de Time Es por esta razón que se ha ganado el puesto número 100 en la lista de 2019 de las mujeres más poderosas del mundo. El poder está en el ojo del espectador, y hay muchas personas que argumentan que ella merece un número diferente; algunos dirán más alto, y otros ciertamente dirán más bajo. Lo que está claro es esto: ella sola no puede revertir el daño que los humanos le han hecho a la Tierra, pero su determinación de hierro y su retórica punzante son imposibles de ignorar. “La gente está sufriendo. La gente está muriendo. Ecosistemas enteros están colapsando,” dijo durante su discurso en las Naciones Unidas en septiembre pasado. “Estamos en el comienzo de una extinción masiva, y de lo único de lo que ustedes hablan es de dinero y cuentos de hadas de crecimiento económico eterno. ¡Cómo se atreven!”.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

 

Siguientes artículos

Mujeres lideran Finlandia: nuevo gabinete tiene 11 ministras y 7 ministros
Por

La nueva primera ministra de Finlandia colocó a mujeres en ministerios clave, como son Finanzas, Justicia, Interior y Ed...