En los últimos dos meses me he entrevistado con diversos directores y fundadores de incubadoras y aceleradoras de negocios. He platicado con ellos sobre lo que le hace falta al ecosistema emprendedor mexicano y me sorprendió que hay más diferencias que coincidencias en sus visiones. Lo que no quiere decir que esté mal, ya que cada uno de estos organismos aporta lo que, a su parecer, les hace falta a los emprendedores en México. En lo que sí coincidieron todos es en afirmar que cada uno de ellos cuenta con el mejor programa de incubación o aceleración del país. Incluso hubo quienes se atrevieron a criticar severamente los programas de otras incubadoras o aceleradoras, pero para mí es muy respetable y plausible el trabajo de todos. Lo cierto es que, como en cualquier sector, en el ecosistema emprendedor hay actores que están haciendo las cosas muy bien, otros regular y otros… las están haciendo. Por ello hoy quiero mencionar a Unreasonable México, una aceleradora que sigue innovando en sus procesos y programas para apoyar a los emprendedores sociales que están resolviendo los problemas más apremiantes del país en ámbitos como ecología, pobreza, salud, educación, inclusión, etc. Hoy, a estos jóvenes mexicanos se les ocurrió -para seleccionar a los integrantes de la quinta generación del Instituto Irrazonable- hacer un reclutamiento de emprendedores sociales tipo cofradía, donde sólo podrán aplicar emprendedores recomendados por mentores de esta aceleradora o por alguno de los integrantes de las cuatro generaciones que han egresado del Instituto. Anteriormente los emprendedores aplicaban en una convocatoria abierta. Este año, no habrá convocatoria, así que los interesados tendrán que ingeniárselas para cumplir el reto de conseguir la recomendación (antes del 27 de mayo) de al menos uno de los más de 90 mentores o más de 70 emprendedores egresados. Los emprendedores seleccionados vivirán tres semanas en una hacienda con 40 mentores e inversionistas, como alguien que ha creado tres empresas que hoy cotizan en bolsa, el creador del auto autónomo de Google o alguien que ha brindado acceso a vivienda a más de dos millones de familias vulnerables. Se trata de mentores y contactos de muy alto nivel y gran valor para cualquier emprendedor. Gracias a los métodos innovadores de selección y aceleración irrazonables el Instituto se ha vuelto un programa interesante al que han aplicado más de 1,200 empresas sociales, pero únicamente 45 han logrado un lugar, de las cuales, 94% siguen activas o han tenido una salida. Desde mi muy particular punto de vista, el éxito de esta aceleradora se debe a que no ha masificado su alcance, lo que le ha permitido crear programas de aceleración únicos e irrepetibles, pues se diseña con base en a las necesidades específicas de cada empresa y cada emprendedor. No quiero decir con ello que los programas masivos de emprendimiento o aceleración no sean buenos, sin embargo, creo que es mejor echar a andar o acelerar 15 empresas exitosas cada año que trabajar con 500 o más emprendedores para ver a cuántos les funciona o no un programa, ya que por más innovador que éste sea el alcance real a largo plazo será limitado.   Contacto: Correo: [email protected] / [email protected] Twitter: @elopez_loyola Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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