En México más de 23 millones de personas participan del envío y recepción de las remesas, 12 millones de ellas son migrantes y el resto beneficiarios de esos flujos.
Este sector representa el 4 por ciento del PIB, y su crecimiento requiere condiciones benéficas para las y los trabajadores, así como sus familias.
Ese es el objetivo de las tarjetas de Financiera para el Bienestar, con las cuales se podrán enviar remesas de Estados Unidos a México de manera más fácil y con una comisión más baja.
Estos recursos han permitido mantener el consumo en los hogares e impulsado la economía del país. Tan solo en los últimos 10 años, de acuerdo con datos del INEGI, crecieron 160.7 por ciento, al pasar de 22 mil 438.3 millones de dólares en 2012 a 58 mil 509.7 millones el año pasado.
La importancia en el gasto de los hogares del país es central. El 5 por ciento las recibe y en casi la mitad de los casos cubren gastos en alimentación, médicos, domésticos o de escolarización, aunque en algunos llega a ser mayor.
Las remesas, en su mayoría destinadas a hogares rurales, contribuyen a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por la ONU, entre ellos, erradicar la pobreza y el hambre, promover la salud, educación de calidad, trabajo decente y crecimiento económico, y reducir la desigualdad.
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El costo de envío puede ser elevado y las innovaciones en tecnología, como los blockchain o las transferencias a través de teléfonos móviles, pueden ser una solución para reducirlo.
Actualmente, las comisiones suponen una media de 6 por ciento del dinero enviado, que supera la meta del 3 por ciento fijada en los ODS. La tarjeta presentada la semana pasada por el gobierno federal para el envío de remesas prevé un pago de 3.99 dólares por un envío máximo de 2 mil 500 dólares, es decir, el 0.1 por ciento.
Hace unos 20 años, una parte importante de estos recursos se enviaban a través de giros postales o bancarios que se intercambiaban por medio de alguna institución financiera. Actualmente, cerca del 99 por ciento se hace por transferencia electrónica.
Contribuir con un menor gasto para las y los trabajadores representa una forma de fortalecer su bienestar, pero también la posibilidad de inversiones en otros sectores.
México es el tercer país con mayores flujos de remesas, después de India y China, en más del 90 por ciento provenientes de Estados Unidos.
La nueva tarjeta de Finabien representa una alternativa para recibir el dinero y disminuir la marginación bancaria. Una nueva era para las remesas.
Contacto:
Salvador Guerrero Chiprés es Presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
TW: @guerrerochipres
Twitter: @elconsejomx
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