El nivel de vida, el vecindario donde residen, el tiempo libre con el que cuenta, la ciudad donde viven, el país y la seguridad ciudadana son los ámbitos de la vida en los que los mexicanos se sienten menos satisfechos, de acuerdo con datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
Del otro lado de la balanza están las relaciones personales y laborales como los aspectos de la vida donde los mexicanos se sienten más satisfechos. Un poco por debajo están los dominios de vivienda y logros en la vida, estado de salud y perspectivas a futuro, según el Módulo Básico de Bienestar Autorreportado con información a julio de 2023 del Inegi.
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El organismo de estadística explicó que el balance anímico general de la población se construye con base en los estados de ánimo que las personas experimentaron el día anterior a la entrevista. Este balance se expresa en un rango de -10 a 10. En julio de 2023, del total de la población adulta, 3.7 % presentó un balance anímico negativo; 23.5 % presentó un balance positivo, pero menor a cinco y 72.8 %, un balance mayor a cinco.
En promedio, el balance anímico de la población adulta tuvo un valor positivo de 6.4. Este balance tiende a ser mayor en los hombres que en las mujeres, con niveles de 6.6 y 6.2, respectivamente. El balance de este mes es menor al reportado en enero de este año, pero mayor a cualquier otro mes desde enero de 2020, antes de la pandemia de Covid-19.
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En julio de este año, en una escala de 0 a 10, la población adulta urbana calificó qué tan satisfecha se encuentra actualmente con su vida: el valor promedio fue de 8.3. Sin embargo, 9.7 % de las personas de 18 y más años se encuentran insatisfechas (con calificaciones entre 0 y 4) o poco satisfechas con la vida (5-6), es decir, por debajo del umbral a partir del cual se considera que la población se encuentra moderadamente satisfecha (43.5 % califican entre 7 y 8) o satisfecha (46.8 % califican con 9 y 10).
Otro aspecto del bienestar subjetivo a valorar es la satisfacción con la vida. Para ello, se pregunta a la población: ¿qué tan satisfecha se encuentra actualmente con su vida? Para su respuesta, se muestra una escala con distintos matices de un color, ordenados de más claro a más oscuro. Los matices se acompañan de números, que van de 0 hasta 10. Cero significa que la persona está totalmente insatisfecha y 10, totalmente satisfecha.
En julio de 2023, se obtuvo un valor promedio de 8.3 en el reporte de satisfacción con la vida en general de la población adulta, igual que el nivel de julio de 2022 y una décima arriba de julio de 2021. En cuanto a la brecha entre hombres y mujeres, de nueva cuenta, los hombres presentaron un nivel de satisfacción superior al de las mujeres: 8.4 frente a 8.3, respectivamente.
Al revisar la diferencia entre hombres y mujeres en los promedios reportados, tanto en julio de 2023 como en julio de 2022, se observa que las brechas en los ámbitos públicos relacionados con la seguridad ciudadana y el país, presentes en 2022, se incrementaron notablemente en 2023. Aumentó también la brecha en el promedio de satisfacción con el nivel de vida, vivienda y vecindario. En julio de 2022 y julio de 2023, persistió la misma brecha en tres de los 12 dominios considerados: salud, ciudad y perspectivas a futuro. Ni en 2022 ni 2023 se observaron brechas entre hombres y mujeres en ámbitos como logros en la vida y relaciones personales.
Un tercer aspecto del bienestar subjetivo es la fortaleza anímica y sentido de vida o eudemonía, que se refiere al bienestar espiritual. Para su medición, se pregunta a la persona qué tanto se identifica con ciertos enunciados y se le pide que los califique en una escala de 0 a 10 —donde 0 significa total desacuerdo y 10, total acuerdo—.
De los nueve enunciados de valencia positiva, la población adulta se identificó más con ‘soy una persona afortunada y soy libre para decidir mi propia vida’, cuyo promedio fue 9.1. El de nivel más bajo lo obtuvo el enunciado ‘la mayoría de los días siento que he logrado algo’, con 8.5 en promedio.
Estos resultados muestran que, de julio de 2022 a julio de 2023, incrementó uno de los nueve enunciados de valencia positiva (‘soy optimista con respecto a mi futuro’), siete de ellos se mantuvieron en el mismo nivel y el restante bajó (‘la mayoría de los días siento que he logrado algo’).
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Por su parte, el único enunciado de valencia negativa, ‘cuando algo me hace sentir mal me cuesta volver a la normalidad’, tuvo un promedio de identificación de 4.3, dos décimas menos que el año anterior.
En julio de 2023, las mujeres presentaron menor nivel respecto a los hombres en relación con cinco enunciados positivos. Para el mes de referencia, hombres y mujeres promediaron igual para: ‘soy una persona afortunada, lo que hago en mi vida vale la pena’, y ‘la mayoría de los días siento que he logrado algo’.
En 2022 y 2023, las mujeres mostraron mayor promedio que los hombres en el enunciado positivo ‘tengo un propósito o misión en la vida’ y en el enunciado negativo ‘cuando algo me hace sentir mal me cuesta volver a la normalidad’. Aquí es donde se encontró la brecha más notable entre hombres y mujeres.
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