El servicio postal de Australia anunció este miércoles el fin a las entregas diarias de cartas, cuyo volumen se ha reducido en casi un 70 por ciento en los últimos 15 años, como parte de una serie de reformas con el objetivo de modernizar la compañía pública y ayudarla a obtener beneficios.
Australia Post apuntó que en su lugar las cartas serán entregadas cada “dos días laborales en el 98 por ciento de las ubicaciones”, mientras que la entrega de paquetes continuará con su frecuencia diaria.
La reforma, anunciada hoy en un comunicado conjunto de los ministerios de Comunicaciones y Finanzas, se implementarán durante los próximos 12 meses junto con otros cambios para aumentar el número de puntos de recogida de paquetes.
El gobierno australiano justificó la medida al señalar que, desde su pico máximo, en 2008, los volúmenes de cartas se han reducido en dos tercios, mientras que los volúmenes de paquetes han aumentado.
Entre el 1 de julio de 2022 y el 30 junio de este año (periodo que recoge el año fiscal australiano), Australia Post entregó alrededor de 500 millones de paquetes -unos 20 paquetes por persona al año-, mientras que cada hogar recibe de promedio dos cartas por semana.
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Servicio postal de Australia anuncia que deja de entregar cartas diariamente
“En un entorno en el que los clientes envían menos cartas y más paquetes, es importante que la estructura empresarial de Australia Post refleje las necesidades del consumidor australiano moderno”, apuntó la ministra de Finanzas, Katy Gallagher.
Durante una serie de pruebas sobre estos cambios, consensuados con los sindicatos, la empresa constató que permitían a los trabajadores transportar hasta un 20 por ciento más de paquetes y realizar entregas en un 10 por ciento más de ubicaciones.
“Estos nuevos procesos significarán que Australia Post continuará brindando el servicio de cartas de alta calidad en el que confían muchos australianos y al mismo tiempo que hará crecer su próspero negocio de paquetería en beneficio de los consumidores, las pequeñas empresas y su propio personal”, indicó la ministra de Comunicaciones, Michelle Rowland.
Australia Post es propiedad del Estado, pero se autofinancia y debe generar un rendimiento financiero.
Sin embargo, en su último año fiscal la compañía registró una pérdida de 200 millones de dólares australianos (más de 131 millones de dólares estadounidenses), la segunda pérdida anual en más de 30 años.
Con información de EFE.
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