Las Universidades para el Bienestar Benito Juárez (UBBJ) reprobaron los lineamientos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), lo cuales evalúan el diseño de la política pública de reciente creación, de acuerdo con un estudio de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI)
El programa universitario no cuenta con esta evaluación, pero MCCI aplicó dicha rúbrica a las UBBJ, lo cual develó que éstas cumplen con el 18% de lo requisitos, es decir alcanzaron 0.72 puntos de un roto al de 4, detalló la presidenta ejecutiva de la organización, María Amparo Casar.
El diagnóstico y la especificación de operación del programa no se entregó a la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ni al Coneval antes de incluir este programa al presupuesto, lo cual pide el artículo 21 de los lineamientos generales para la Evaluación de los Programas Federales de la Administración Pública Federal, detalló.
Los lineamientos de operación de las UBBJ fueron publicados en el Diario Oficial de la Federación hasta el 21 de noviembre de 2019, explicó.
“Un programa público de tal envergadura, en los términos de su diseño como política pública no cumple ni siquiera con los requisitos elementales”, detalló Leonardo Núñez González, investigador de MCCI.
Te recomendamos: AMLO dialoga con Microsoft sobre creación de tres universidadesEste programa está clasificado como “u”, lo cual quiere decir que no requieren de reglas de operación, y esto lo deciden las máximas autoridades, por ello es que las UBBJ pueden operar sin el visto bueno del Coneval, refirió Amaparo Casar.
Aunque la meta inicial del programa era darle una oportunidad de educación a 300,000 jóvenes durante este sexenio, en el primer informe presidencial se detalló que son 39,600 los estudiantes inscritos en estas universidades, indicó el reporte de MCCI.
Contrario a lo que dijo el presiente Andrés Manuel López obrador, que los planteles educativos se ubicarían en las zonas más marginadas, el estudio reportó que 40 de ellas están en una zona de bajo y muy bajo nivel de marginación, 29 en un estado medio, y 37 en un estado alto o muy alto de marginación, abundó Amaro Casar.
De los 1000 millones de pesos presupuestados destinados para ese programa en 2019, de enero a septiembre no se reportó gasto alguno, sino hasta el cuarto trimestre: entre octubre y diciembre se ejercieron 880.2 millones de pesos, refirió.
“Me parece extraño que 100 universidades hayan podido operar sin ningún tipo de recurso durante nueve meses” delineó Amparo Casar, luego que López Obrador indicó que las UBBJ iniciaron clases en marzo de 2019.
Las más marginadas
MCCI seleccionó 30 planteles de los 100, tomando en la clasificación de los situados con mayor grado de marginación, los cuales visitó y entrevistó a algunas de las autoridades de las instituciones.
De los planteles seleccionados, ninguno contó con los elementos necesarios del Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (RVOE), es decir, no pueden extender títulos profesionales ni cédulas para el ejercicio profesional, insistió la presidenta ejecutiva de la organización.
También lee: AMLO pugna por la desaparición de los exámenes de ingreso a universidadesEn promedio, estas 30 universidades sólo cumplen el 46.2% de los criterios, mientras la universidad ubicada en Ticul, Yucatán, cumple con el 67.6% de los parámetros que pide la secretaría de educación pública (sep) para la validez oficial de los estudios, refirió.
En promedio, los planteles cuentan con 153 estudiantes, y el caso de la escuela Juan R. Escudero, ubicada en Guerrero, fue la sede que tuvo más alumnos, es decir 610, mientras que la ubicada en Palenque Chiapas, sólo se ubicaron a 13 estudiantes, detalló.
En cuanto al promedio de profesores por plantel, es 4.3, siendo el plantel Juan R Escudero en el estado de Guerrero con 13 docentes la escuela con más profesores,mientras en Palenque, Chiapas sólo se encontró un maestro, develó.
Propuestas
De acuerdo con amparo casar, el propósito del estudio no es ir en contra de la actual administración, si no señalarle los errores en el programa para que éstos puedan ser mejorados. Por tanto, sugirió elevar el número de alumnos de las universidades públicas ya existentes, así como becar a los estudiantes de las mismas.
También sugirió construir sedes regionales de la Universidad Nacional autónoma de México y del Instituto politécnico nacional. Además de concentrar el presupuesto en la regiones de alta y muy alta marginación.
Insistió en la necesidad de calendarizar y aplicar los recursos oportunamente, asegurar el cumplimiento de los requisitos del RVOE para poder expedir títulos profesionales.
