Pau Jené, un emprendedor sin prisa

El fundador de Geonick cree que la interacción en redes sociales no tiene que ser una competencia por popularidad y en verdad pueden encontrarse personas con afinidades comunes.   Antes de que empezara el auge de las redes sociales, éstas prometían conectar a la gente con las mismas afinidades, intereses y hobbies. La premisa no se cumplió del todo. Facebook y Twitter se volvieron los grandes directorios y herramientas de promoción por excelencia. Son los escenarios por los que las personas y las empresas compiten por popularidad. A Pau Jené se le ocurrió mientras caminaba un día por el centro de Barcelona desarrollar una red social que en verdad conectara a las personas con las mismas inquietudes, sin tener que luchar por ‘likes’ o ‘favs’. ¿Una idea demasiado romántica en un mundo tan competido? Puede ser. Lo cierto es que Geonick, esta idea que nació en el verano de 2010, ya se expandió de España a América Latina y llega a México, el quinto país con más usuarios de Facebook en el mundo, para posicionarse con una promesa: no le interesan tus datos para llenar tu pantalla de publicidad, y nada de lo que escribas dentro de Geonick lo encontrarás después en Google.   Un viaje tranquilo Geonick.com es una herramienta que permite conectar con gente con intereses comunes a través de un mapa. Sólo tienes que dar tu código postal (nunca indicarán tu localización exacta), enumerar hasta diez hobbies, aficiones o asuntos que te interesan, y también tus lugares favoritos. En seguida podrás encontrar a otros usuarios con las mismas coincidencias, ya sea en México u otras latitudes. “Geonick propone una experiencia social nueva a partir de un viaje o exploración geográfica alrededor del mundo. Basándonos en el espíritu de los antiguos exploradores del Siglo XIX que viajaban alrededor del mundo en búsqueda de nuevas culturas, viviendo nuevas historias y conociendo a nuevas personas”, explica Pau Jené en entrevista.   La interfaz gráfica de la red social, que tiene como logo a un viajero en globo aerostático, invita precisamente a explorar nuevos lugares y a otras personas. Como una novela de Julio Verne. Las redes sociales más populares tienen sus propios motores de búsqueda para conectar gente similar. El de Geonick, dice Pau Jené, es diferente: “Si en Geonick un usuario escribe que su afición es leer a un escritor concreto (por ejemplo: Robert Walser), encontrará en los mapas únicamente a personas con el mismo autor predilecto, y no a todos a los aficionados a la lectura en general. Otras redes sociales, en cambio, ofrecen unas pocas categorías cerradas como ‘Cine’, ‘Música’ o ‘Lectura’, y entonces los contactos propuestos son de menos calidad y más ambiguos”. El “manifiesto” de Geonick critica que “las grandes redes sociales se convierten frecuentemente en un mercado donde se exhiben productos en venta. Y quien está en venta, en muchas ocasiones, somos nosotros mismos”.  Por ello, Jené asegura que no le interesan los datos personales de los usuarios, de modo que uno puede registrarse sólo usando un nickname.   Sin prisa por ver retornos Si una red social no se financia a través de la publicidad ni del uso de los datos de sus usuarios, ¿entonces cómo sobrevive? Geonick tuvo una inversión de 100,000 euros (1.6 millones de pesos) para desarrollarse, pero Pau Jené dice no tener prisa por ver los retornos. “En este tipo de proyectos los retornos nunca son rápidos. De todos modos, el modelo ‘Freemium’ de Geonick, similar al de otras redes sociales como Spotify o LinkedIn, permite ofrecer algunos servicios opcionales de pago que permiten empezar a recuperar la inversión”. Este modelo de negocio ya está probado. Además de los ejemplos antes mencionados, está Skype, que desde 2003 ofrece llamadas y videoconferencias a precios competitivos, ha sido descargado más de mil millones de veces de forma gratuita. Ahora esta aplicación ya se ‘comió’ al Messenger de Microsoft. “Hacer dinero mientras haces a tus usuarios felices”, es la premisa del Freemium. Mientras la inversión regresa, Jené espera que la gente disfrute la experiencia en Geonick descubriendo nuevos lugares y nuevas personas “al ritmo de cada cual”.