Día del trabajo-03 Los millennials representan 25% de la población en el país y su capacitación requiere una inversión de 786 mdd. Están íntimamente ligados a la tecnología, el multitasking y la innovación, pero contratarlos también implica retos para las organizaciones. ¿Está listo el mercado laboral para ellos o deben salir a crear sus propias empresas?    Los millennials son una generación amante de la libertad. Elias Cattan es arquitecto y profesor. Pertenece a los 30 millones de millennials que decidieron no formar parte de las estadísticas de desempleo o trabajadores asalariados: es el fundador de Taller 13, un despacho de arquitectura y  diseño. “La necesidad de impulsar productos de regeneración urbana ante el panorama político del país, de todo el sistema corporativo corrupto, me ha orillado a alejarme del trabajo asalariado”, comenta. Como Elias, muchos millennials optan por crear su empresa o trabajar como profesionales independientes para establecer sus propias condiciones laborales. En el país hay 11.1 millones de trabajadores que se desempeñan por cuenta propia, según datos del Inegi. La principal característica y ventaja de los millennials es su capacidad de hacer varias cosas a la vez (ser multitask). Según un estudio de Accenture, 92% de los trabajadores de la Generación Y pasa más de la mitad de su jornada laboral haciendo varias cosas al mismo tiempo. Así, las multitareas, el apego a la tecnología y las ideas innovadoras los convierten en un sector altamente competitivo y bien preparado, aunque estas características representan riesgos de adaptación a la cultura organizacional, pues esta nueva generación no congenia con los horarios fijos, la convivencia con otras generaciones y el ahorro. Los millennials representan el 25% (30 millones) de la población del país, casi la misma proporción que la población económicamente inactiva (35.4 millones), afirman datos del Inegi.  En 10 años se convertirán en 75% de la fuerza laboral, según Universum Global, consultora de posicionamiento de marcas. El panorama para esta generación ofrece sólo tres alternativas de inserción al mercado laboral: acoplarse a la cultura organizacional actual, transformar esa cultura o crear su propia empresa. “Los millennials saben escuchar mejor, pero también saben hablar mejor de sus necesidades. Otro factor importante es el acceso a la información, la globalización, ya que son nativos digitales”, comenta en entrevista Viridiana Hernández, gerente de Industria de Productos de Accenture México, quien señala que las empresas invierten cerca de 786 millones de dólares al año en capacitación para este sector. Gráfico: Édgar Cruz    Millennials vs. la tradición  Un día de trabajo en Taller 13 es altamente dinámico. Cada uno de los empleados pone de su parte en los prototipos, las ideas y el diseño del proyecto. “Es un proceso muy interactivo y divertido; es distinto de trabajar en una empresa multinacional, donde la comunicación entre las áreas gerenciales y creativas es limitada”, señala Elias, quien llega caminando, en bicicleta o prefiere, sobre el uso del auto, utilizar servicios como el de Uber, otro ejemplo de empresa millennial. En cuanto al panorama de los millennials en las corporaciones, seis de cada 10 ejecutivos consideran que las nuevas generación se sienten frustradas por las actuales técnicas de dirección, así lo arroja el estudio Workforce 2020. Eso podría ser una constante de fricción entre generaciones, pues los millennials son considerados celosos de su independencia y forma de pensar. Pese a los roces, del estudio se desprende que en México 53% de los ejecutivos confían en los millennials para llenar su plantilla laboral. “La convivencia que tienen actualmente las empresas con estas nuevas generaciones se está alineando cada vez más. Falta estrechar relaciones; sin embargo, con este entorno global los millennials están respondiendo en el entorno laboral”, afirma Viridiana Hernández, de Accenture. La investigación Benefits for Tomorrow Study, realizada por The Hartford, explica que nueve de cada 10 millennials considera que los Baby Boomers son una gran fuente de conocimiento. Asimismo, un 93% de los Baby Boomers concuerda con que los millennials suman nuevas aptitudes e ideas frescas. La falta de apego a la cultura del ahorro es otra desventaja, quizá la más considerable. Según la firma Old Mutual, especialista en inversiones y ahorro, los millennials están inmersos en un alto consumismo, sobre todo ante las novedades tecnológicas. Esto podría afectar a las empresas, pues esas compras se centran en tecnología y consumo online, lo cual puede restar tiempo dentro de la jornada laboral. Un estudio del Wall Street Journal señala además que los jóvenes a nivel global tienen una tasa de ahorro anual de -1.7%, lo que quiere decir que gastan más de lo que ganan, una conducta que a la larga genera estrés entre los empleados.   Tecnología y adaptación En el caso de Taller 13, el emprendedor afirma que el desembolso y la inversión de tiempo en tecnología e innovación son fundamentales, pues son parte indispensable en el proceso de diseño. “La arquitectura sin tecnología ya no aplica. Sería lo mismo que realizar un plano bastante complejo sólo con lapices y reglas. Las maquetas ahora se hacen en cortes con láser o impresión de 3D; no podemos ignorar esos avances o tratar de postergar su adopción”, comenta. Para los empleados de Taller 13, ese mejor desempeño se complementa con los diferentes tipos de gadgets, principalmente smartphones y tablets, que les facilitan trabajar desde casa o prácticamente de cualquier lugar con el mejor ambiente posible. Taller 13 se centra actualmente en un proyecto de joyería inspirada en agua. Para todo el equipo, la salud y los temas relacionados con la ecología, energía o el ahorro del vital líquido son de suma importancia. “A la gran mayoría no le interesa ser saludable, tener un entorno saludable, al igual que una ciudad saludable. Para nosotros ésa es la prioridad. Es claro que nos estamos enfocando en otras líneas de acción. Nuestros objetivos son distintos de los de otras compañías y se puede interpretar que es porque vemos a más largo plazo.”

 

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