- El cambio de la CFC para convertirse en la Cofece ha causado un retroceso, ya que se le dio prioridad a la transición administrativa sobre las investigaciones.
- No hay experiencia en la persecución penal.
- La autoridad se ha enfrentado a importantes problemas con el proceso internacional en el procesamiento de cartas rogatorias.
- La escasez de personal para procesar toda la información de las investigaciones internacionales (incluyendo traducciones y costos) ha hecho que sea más difícil establecer un caso sólido.
- Además, antes de las reformas del 2013, la CFC no contaba con las mismas facultades que se tienen tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea como en la jurisdicción extendida o la facultad de llevar a cabo visitas de verificación sorpresa.
¿Por qué México necesita una ley de competencia?
¿Necesitamos contar con una ley de competencia económica después de una reforma sustancial en 2011? La respuesta es que sí, en particular, una que responda a la principal preocupación mundial: detección, eliminación y sanción de los cárteles internacionales.
Por: Omar Guerrero Rodríguez*
Muchos regímenes de todo el mundo han introducido recientemente cambios importantes en sus leyes de competencia, entre ellos México. Pero la pregunta es si realmente necesitamos contar con una ley de competencia económica después de una reforma sustancial en 2011. La tendencia ha sido que en el último siglo ha existido un crecimiento exponencial en la creación de organismos de competencia y un desarrollo en la cooperación institucional en todo el mundo.
La respuesta es que, sin duda, es importante contar con una ley de competencia más moderna y, en particular, que responda a la principal preocupación mundial: detección, eliminación y sanción de los cárteles internacionales.
Cuando el país comenzó a regular la competencia económica en 1992, no contaba con presencia significativa en el campo de la investigación y sanción de los cárteles internacionales. El programa de inmunidad, creado en 2006, cobró fuerza después de las reformas a la Ley de Competencia de marzo del 2011, en las que se fijaron altas multas para los cárteles y tipificó como delito la conducta de cartelización con penas privativas de la libertad hasta por un máximo de 10 años.
Actualmente, la mayoría de las investigaciones internacionales han comenzado como una consecuencia natural de los programas de inmunidad, del acceso a la información pública en otros países o de la cooperación con los organismos extranjeros. Como resultado, la antigua Comisión Federal de Competencia (CFC) investigó varios casos internacionales. Estos casos, al principio, dieron lugar a pequeñas multas (por ejemplo, el caso de lisina), pero casos recientes han aumentado de forma significativa la multa a los participantes de cárteles. Existen diversas investigaciones en relación con cárteles internacionales (aunque concluidas en otras jurisdicciones) que aún continúan en México (por ejemplo, productos de consumo electrónicos y autopartes).
En el 2014, la Cofece (nuevo órgano constitucional autónomo competente en México para conocer de todas las industrias, excepto telecomunicaciones, radio y TV) impuso su primera multa a un cártel internacional de la industria de refrigeración que tuvo efectos en México. La Cofece impuso multas por un total equivalente a 16.9 millones de dólares. Esta cantidad marca un contraste con aquella de los líderes en la lucha contra los cárteles internacionales: Estados Unidos y la Comisión Europea. Ambos ya han acumulado más de 1,000 millones de dólares en multas durante el 2014, y se encuentran en camino de romper los récords anteriores.
Sin embargo, se espera en México un incremento significativo en las multas, ya que los casos que se investigan caerán bajo el nuevo régimen de competencia, donde las multas pueden ser de hasta 10% de los ingresos que se obtienen en México. También los nuevos órganos de competencia tienen la nueva herramienta penal que sanciona –drástica y fuera de parámetros mundiales–, desde 5 años como mínimo y 10 años como máximo la conducta cartelizadora.
El historial adverso de México en el pasado se debe a algunos factores determinantes: