En la pasada Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado en Cartagena de Indias, Colombia,  la juventud fue uno de los temas más importantes, pues en América Latina hay 30 millones de jóvenes que no estudian, ni trabajan que son conocidos como Ninis. “Empezamos con una fuerte abogacía, cuando vimos que había una oportunidad muy fuerte en la Cumbre Iberoamericana debido a que los principales temas fueron educación y emprendimiento, por lo que pedimos que se centrara la temática en la juventud”, dice a Forbes Centroamérica, Max Trejo Cervantes, secretario general de la Organismo Internacional de Juventud (OIJ) para Iberoamérica. Trejo Cervantes,  quien ganó el Premio Nacional de la Juventud en 2009, comenta que el organismo plantea una estrategia reconociendo que la situación de los Ninis en las zonas rurales es diferente a la de los que se ubican en zonas urbanas, sin embargo, un punto en común es la desigualdad en la que se encuentran. El estudio “Juventud, Educación y Emprendimiento” de la OCDE y el CAF revela que los Ninis están en la actualidad desempleados pero buscan empleo; están esperando un trabajo o sufren una discapacidad que les impide trabajar o estudiar. “Lo caricaturizo como una doble cara de la moneda, por un lado tienes jóvenes con todas las condiciones y con un entorno favorable para ser protagonistas de sus vidas, pero por el otro lado tienes jóvenes que sufren cada día para cubrir sus necesidades básicas y son marginados. Por lo tanto, la brecha de la desigualdad se acentúa”, explica a Forbes Centroamérica. Para que estos más de 20 millones de Ninis salgan de esta situación fue necesario poner un compromiso, una suma de voluntades y actores para llevar a cabo el Pacto Iberoamericano por la Juventud. Puedes leer: América Latina tiene 20 millones de ninis: Banco Mundial Trejo Cervantes señala que un punto a favor de los jóvenes es que la educación se va a flexibilizar, por lo que habrá un desarrollo diferente en habilidades y capacidades que le pueden facilitar a estos su proyecto de vida. “El pacto apuesta por una certificación de habilidades que tienen que ver con la Cuarta Revolución Industrial”. El secretario general de la OIJ considera que la estrategia para frenar el fenómeno de los Ninis se debe sostener en el fortalecimiento de las habilidades, así como el impulso de trabajos relacionados con empleos verdes, las industrias creativas y la digitalización. A continuación, los pilares de la estrategia del OIJ para detener el fenómeno de los Ninis. Fortalecimiento de las habilidades.  Formación y certificación en habilidades y capacidades que tienen que ver con la Cuarta Revolución Industrial. Empleos verdes. La formación de puestos de trabajos que tengan relación con la sustentabilidad del medio ambiente. Industrias creativas. El talento y capacidad de las personas para impulsar a este sector, debido a que el consumo sigue creciendo entre la población. Procesos de digitalización. Con la transformación de los servicios que hay a través de las nuevas tecnologías será necesaria la capacitación del capital humano joven. “En estos cambios tan vertiginosos tenemos la capacidad como Estados y sociedades de fortalecer las capacidades que tienen las personas jóvenes. Si ellos no encuentran la oportunidad, la van a crear”, añade. Cuestionado sobre cómo se podrán observar los avances de este pacto, Trejo Cervantes dice que habrá métricas para cuantificar y registrar, pero que los más importante es el compromiso de los gobiernos. La reformulación del organismo pieza clave para el pacto Desde hace 10 años no se realizaba una cumbre de la juventud en la región, de ahí parte la importancia de la reformulación del organismo, cometa el titular del organismo. “Si no se toman acciones en este momento y no se da seguimiento esto se pierde”, advierte. Trejo Cervantes indica que uno de los objetivos de la OIJ es que los gobiernos prioricen las políticas públicas de la juventud, debido a que los jóvenes son los actores sociales que pueden hacer los cambios que se necesitan. Puntualiza que aprovechar las oportunidades es imperativo debido a que se cuenta con el talento y un bono demográfico de 163 millones de jóvenes. “No hay mejor época para ser joven que la actual debido a las herramientas que hay, como la digitalización”, destaca.

 

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