Los conductores de Uber, Lyft y DoorDash en Estados Unidos iniciaran un paro de actividades este miércoles en un esfuerzo por beneficios y salarios más altos, aunque las compañías afirman que los conductores están satisfechos y dudan que las protestas tengan mucho impacto en sus negocios.

Los miembros de la organización Justice for App Workers, que representa a unos 130,000 conductores en todo el país, rechazarán viajes hacia y desde los aeropuertos el miércoles entre las 11:00 y las 13:00 horas en 10 ciudades, incluidas Miami, Chicago, Newark, Austin y Filadelfia.

Debido a que los trabajadores de aplicaciones de viajes compartidos y entregas se consideran proveedores, no tienen las mismas protecciones que los empleados de tiempo completo, como salarios garantizados, tiempo libre remunerado , licencia por duelo, cobertura médica y licencia parental.

Los conductores quieren que se implementen más medidas de seguridad y trabajar menos horas a la semana, ya que algunos trabajaban más de 80 horas.

Los trabajadores también buscan cambios en el proceso de desactivación, en el que las cuentas de los conductores pueden desactivarse después de que los clientes presenten quejas, dejando a algunos empleados sin su principal fuente de ingresos, y Uber reconoció que los clientes a veces presentan quejas falsas con el fin de obtener reembolsos.

Rideshare Drivers United está convocando a sus 20,000 miembros con sede en California a hacer un protesta el miércoles afuera del Greenlight Hub de Uber en Los Ángeles.

“Durante demasiado tiempo, los trabajadores de viajes compartidos y repartidores han trabajado en condiciones de fábrica explotadora, a menudo trabajando entre 60 y 80 horas a la semana para sobrevivir con salarios de pobreza mientras las empresas de aplicaciones reciben tajadas cada vez mayores de nuestros bolsillos incluso mientras continúan aumentando las tarifas”, dijo Justice for App Workers a Forbes.

Uber comentó a Forbes que este tipo de eventos en el pasado “rara vez tuvieron algún impacto en los viajes, los precios o la disponibilidad de los conductores, y esperamos lo mismo mañana”. 

La compañía afirma que la “gran mayoría de los conductores están satisfechos”, ya que ganaron alrededor de 33 dólares por hora (contando el tiempo desde que se acepta un viaje hasta que se deja a un cliente) en el más reciente trimestre, y dice agregará nuevas características de seguridad y mejorará su proceso de desactivación de controladores, al que previamente agregó actualizaciones en noviembre. 

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Estas actualizaciones incluyen nuevas medidas para identificar acusaciones falsas hechas contra conductores y la capacidad de los conductores de solicitar una revisión adicional a su eliminación. 

“Trabajamos constantemente para mejorar la experiencia del conductor, razón por la cual este mes lanzamos una serie de nuevas ofertas y compromisos destinados a aumentar la remuneración y la transparencia de los conductores”, señaló Lyft.

Un informe publicado por Lyft la semana pasada encontró que los conductores ganaron en promedio 30.68 dólares (incluidas propinas y bonificaciones) por hora de conducción y 23.46 dólares después de gastos. La compañía también estableció nuevos ingresos mínimos garantizados para los conductores de al menos el 70% de sus tarifas semanales después de cargos.

En total, 6.5 millones de conductores trabajan para Uber, de acuerdo con un informe de la firma.

Miles de conductores de Uber y Lyft en todo Estados Unidos protestaron en 2019, días antes de las ofertas públicas iniciales de las empresas. Exigieron seguridad laboral, un límite a lo que cada compañía puede ganar con las comisiones de viaje y salarios más altos. 

NY, la primera ciudad en establecer un salario mínimo 

El año pasado, la ciudad de Nueva York se convirtió en la primera en establecer un salario mínimo para los conductores de entrega de aplicaciones. Es de 17.96 dólares la hora, pero aumenta cada año debido a la inflación, por lo que subirá a 19.95 dólares a partir del 1 de abril.

Aunque los conductores informaron controles más altos en la primera semana después de que la ley entró en vigor, aplicaciones como Uber, DoorDash y Grubhub comenzaron compensar los nuevos salarios moviendo la opción de dar propina después de que los clientes ya hayan realizado sus pedidos (lo que los conductores creen que hace que los clientes sean menos propensos a dar propina) y transfiriendo costos adicionales a los clientes, según un informe de Bloomberg. 

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Las propinas solían representar el 50% del salario de los conductores, pero se redujeron a entre el 5% y el 15% después de que la ley entró en vigor. Un proyecto de ley de 2022 aprobado en el estado de Washington requiere que los conductores de viajes compartidos ganen al menos 1.17 dólares por 1.6 kilómetros y 0.34 dólares por minuto, además de recibir beneficios como licencia por enfermedad y seguro de compensación laboral. 

Sin embargo, los conductores de viajes compartidos tuvieron que permanecer clasificados como proveedores y no como empleados, lo que significa que no pueden recibir otros beneficios como seguro médico o pago de horas extras. 

Uber y Lyft amenazaron con abandonar Minneapolis el año pasado si se aprobaba una legislación que exigía a las empresas pagar a los conductores al menos 1.40 dólares por 1.6 km y 0.34 dólares por minuto, aunque finalmente fue vetada por el gobernador de Minnesota, Tim Walz.

Este artículo fue publicado originalmente en Forbes US

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