La demanda de gasolina en México sigue evaporándose ante la crisis sanitaria que vive el país por la pandemia de coronavirus Covid-19.
Del 16 de marzo al 12 de abril de 2020, la demanda mexicana cayó de 797,000 a 538,000 barriles diarios de gasolina. Esto quiere decir que el consumo del combustible se contrajo 32.4% en menos de un mes, su peor nivel en los últimos cuatro años de registro de la Secretaría de Energía (Sener).
Las cifras comienzan a acercarse con la caída de 60% en las ventas de gasolina reportadas durante la semana pasada por la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), y que se hundirán a 80% durante la frase 3 de la contingencia, según sus pronósticos.
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Petróleos Mexicanos (Pemex) produjo 246,000 barriles de gasolina diarios, un aumento de 2%, mientras que las importaciones cayeron 12% a 559,000 barriles diarios, en la última actualización de las estadísticas de petrolíferos de Sener.
La dependencia que encabeza Rocío Nahle no actualizó las cifras de inventarios de gasolina, ubicados en 6.72 millones de barriles hasta la semana 12 de 2020, su mayor nivel desde 2016 para ese periodo.
Forbes México consultó a la Sener sobre el tema, pero no obtuvo respuesta.
Ante la llegada del virus a nuestro país, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ordenó la suspensión de clases en todos los niveles, el cese de actividades laborales no esenciales en el sector público, privado y social, lo que ha provocado una depresión económica sin precedentes.
La Ciudad de México y Jalisco, dos de los tres principales mercados de combustibles del país, han implementado medidas severas para reducir la movilidad social. La jefa de gobierno de la capital Claudia Sheinbaum activó el Programa ‘Hoy No Circula’ sin importar el holograma vehicular. Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, amenazó a sus habitantes con usar la fuerza pública si violan el aislamiento obligatorio y el uso de cobrebocas en la entidad.
Las autoridades han dicho que la cuarentena se levantará hasta el 31 de mayo de forma escalonada.
A pesar de la falta de demanda, López Obrador pretende elevar la refinación de petróleo crudo a un millón de barriles en mayo, en medio de la saturación de sus terminales de almacenamiento, que ha obligado Pemex a usar barcos como almacenamiento flotante.
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