El Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos elaboró en mayo pasado un informe titulado “México: antecedentes y relaciones con EU”, en el que ofrece una panorámica sobre nuestro país y enlista los puntos más controversiales en la agenda bilateral. La palabra fentanilo es mencionada 42 veces a lo largo del documento, en señal del énfasis que le ha puesto el vecino del norte a un tema que por momentos ha tensado la relación diplomática y ha provocado serios cruces de declaraciones entre ambos gobiernos.
Desde el primer párrafo el documento hace referencia al fentanilo, dejando ver la importancia que tiene el tema para Estados Unidos. “México, el décimo país más poblado y la decimoquinta economía más grande del mundo, está unido a los Estados Unidos por la geografía y fuertes lazos económicos, culturales e históricos. Además de compartir una frontera de casi 2,000 millas con los Estados Unidos, México se encuentra entre los principales socios comerciales de los Estados Unidos y un importante proveedor de energía de los Estados Unidos”, se lee.
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Y en seguida Estados Unidos va directo al punto: “la violencia criminal en México ha puesto en peligro la seguridad de los ciudadanos estadounidenses en partes de México, y la producción y el tráfico de fentanilo desde México han contribuido al aumento de las sobredosis de drogas en los Estados Unidos. Los vínculos entre Estados Unidos y México, tanto positivos como negativos, se manifiestan en la actividad legislativa y el interés en una amplia gama de temas en el Congreso”.
A lo largo del informe el Congreso de Estados Unidos señala 10 puntos cruciales en la agenda bilateral, uno de ellos, por supuesto, es el tráfico de fentanilo. Otros son la cooperación en materia de seguridad y ayuda exterior; extradiciones; derechos humanos; comercio; manejo de la migración; relaciones económicas y comerciales en el marco del TMEC; energía y preocupaciones ambientales, hídricas y de salud fronterizas.
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Fentanilo, un protagonista incómodo
El fentanilo, una droga que es altamente consumida en Estados Unidos y presuntamente producida y traficada desde México con materiales provenientes de China, es un protagonista incómodo dentro del informe. “En las últimas décadas, las relaciones bilaterales mejoraron a medida que las economías de Estados Unidos y México se integraron más y los países trabajaron juntos para abordar el crimen, la migración y otros temas de interés compartido”, menciona el documento antes de poner uno de los primeros peros.
“Sin embargo, en ocasiones han surgido desacuerdos sobre estos temas, como lo demuestran las preocupaciones de Estados Unidos sobre la producción y el tráfico de fentanilo desde México y las preocupaciones del gobierno mexicano sobre las acciones antidrogas de Estados Unidos dentro de México y el tráfico de armas. Podría decirse que la historia de la intervención militar y diplomática de Estados Unidos en México ha exacerbado esa tensión”, reconoce el texto del Congreso de Estados Unidos publicado el 17 de mayo de 2023.
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El documento reseña que en julio de 2022 se reunieron los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador, y de Estados Unidos, Joe Biden, y “se comprometieron a abordar la inflación, promover las energías renovables, modernizar la infraestructura fronteriza, reforzar los esfuerzos contra el fentanilo y el tráfico de armas, y abordar las causas profundas de la migración irregular”. Luego en enero de este año se celebró en la Ciudad de México la Cumbre de Líderes de América del Norte, en la que, “si bien se avanzó prioridades sobre inclusión, medio ambiente, competitividad, migración, salud y seguridad regional, la cumbre no abordó las disputas comerciales en curso ni dio lugar a nuevas iniciativas para abordar la migración irregular o el tráfico de fentanilo”.
Más adelante se plantea que “dada la epidemia en curso de sobredosis relacionadas con el fentanilo en los Estados Unidos, el control del fentanilo se ha convertido en una de las principales prioridades estadounidenses en la relación entre Estados Unidos y México. Algunos observadores han cuestionado la eficacia de la cooperación en seguridad entre Estados Unidos y México desde que México emergió como la principal fuente de fentanilo con destino a Estados Unidos”.
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“En la actualidad, la mayor parte del fentanilo ilícito destinado a Estados Unidos se produce clandestinamente en México, utilizando insumos químicos (es decir, precursores) de la República Popular China. Esto representa un cambio significativo en las tendencias de producción y tráfico de fentanilo desde 2019, cuando China era la principal fuente de tráfico de fentanilo ilícito con destino a EU”. Como posibles responsables de este cambio el Congreso de EU señala al Cártel de Sinaloa y al Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), quienes “parecen ser en gran parte responsables de la adquisición de precursores de Asia (a través de puertos de entrada marítimos y aéreos)”.
La investigación apunta que “en 2022, México amplió su incipiente ‘lista de vigilancia química’ para precursores de doble uso, una medida que puede generar oportunidades para mejorar el intercambio de información regional y la acción regulatoria dirigida a los precursores de fentanilo. Las acciones conjuntas en 2022 incluyeron sanciones financieras dirigidas a los traficantes mexicanos de fentanilo, el desarrollo de un plan de acción conjunto para combatir los opioides sintéticos y mayores esfuerzos de EU para ayudar a las agencias militares mexicanas a crear registros de incautaciones de fentanilo y precursores para enviar a una base de datos central”.
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Los autores de reporte indican que “la tensión entre la DEA de EU y el gobierno mexicano, así como la corrupción persistente en México, ejemplificada por la condena del exsecretario de Seguridad Pública en EU, Genaro García Luna por cargos de narcotráfico, siguen siendo obstáculos para la cooperación”. Según el texto, en 2021 la DEA ubicó a 50 empresas mexicanas presuntamente involucradas en el lavado de dinero obtenido a partir de la comercialización de precursores químicos utilizados para la producción de fentanilo, pero “la UIF se negó a incautar todas las cuentas de las empresas excepto una”.
“El presidente López Obrador también criticó las actividades de recopilación de inteligencia de EU en México para el tráfico de fentanilo. Estos desarrollos podrían obstaculizar los esfuerzos que han acelerado en lo que va de 2023, ya que la fase dos del Marco del Bicentenario ha centrado los esfuerzos bilaterales en la lucha contra el fentanilo (y el tráfico de armas de Estados Unidos a México)”, comenta el reporte hacia el final del apartado relacionado con el fentanilo.
Finalmente da cuenta de iniciativas legislativas en el Congreso de Estados Unidos relacionadas con el combate al fentanilo. “Los miembros del Congreso han presentado una serie de propuestas para abordar el tráfico de fentanilo desde México, incluida una medida informada por el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara, HR 3205, que trabajaría con México para interrumpir las cadenas de suministro de fentanilo y contrarrestar las operaciones de fentanilo chino en México. Mientras que ese proyecto de ley exige la cooperación entre Estados Unidos y México, otros, incluidos los proyectos de ley que autorizarían el uso de la fuerza militar estadounidense en México (HJRes. 18) y que designarían a los cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas extranjeras han provocado fuertes reacciones negativas por parte del gobierno mexicano”.
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