Existen diversos factores que se asocian con el éxito y la riqueza, como la educación. Sin embargo, estas historias de estos tres multimillonarios demuestran que no siempre tener un título es sinónimo de triunfar en los negocios.
Richard Branson
El fundador de Virgin Group dejó la escuela a los 15 años para fundar una revista. Ha reconocido que no se sentía atraído por el plan de estudios tradicional, pues lo encontraba irrelevante o poco interesante. Lo que le resultó más atractivo fue recaudar dinero para hacer realidad Student magazine con el fin de dar una voz a otros estudiantes frustrados como él.
Para conseguir capital llamó en frío a varias empresas y les pidió que sacaran anuncios en contra de su competencia, a lo cual accedieron. Al final recaudó más de tres mil dólares. El director de su escuela quedó impresionado por su poder de convencimiento y no dudó en decirle: “O vas a la cárcel o te vas a convertir en millonario”.
La dislexia también contribuía a la apatía de Branson por el aprendizaje en el aula, pero hoy reconoce que este trastorno del aprendizaje en realidad está ligado con un alto nivel de creatividad y resolución de problemas.
En la actualidad, el imperio de Richard Branson incluye aerolíneas, hoteles y más. Por ello, su patrimonio neto se estima en alrededor de 3,500 millones de dólares.
Este es el caso de un joven que no solo aprendió a monetizar productos y servicios que necesitaban las personas a temprana edad, sino que también identificó que necesitaba rodearse de personas que fueran mejores en áreas en las que él no era tan bueno para alcanzar el éxito.
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Larry Page
Larry Page, cofundador de Google, se graduó en la universidad aunque no pudo completar sus estudios de doctorado, pero hay un motivo de gran peso para ello.
Básicamente se debió a que Larry y su socio comercial Sergey Brin cambiaron la forma en que la mayoría de la gente usaba internet mientras estudiaban; ambos comenzaron a trabajar en un proyecto llamado “La anatomía de un motor de búsqueda web hipertextual a gran escala”.
Su desafío era rastrear la web de manera eficiente y proporcionar resultados más relevantes que los motores de búsqueda que estaban disponibles en ese momento. El dramático crecimiento de la web presentó problemas para rastrearla, mantener la información rastreada actualizada, almacenar los índices de manera eficiente y manejar muchas consultas rápidamente. El proyecto de Google se basó en la tecnología PageRank que la pareja desarrolló.
Al inicio ninguno de los dos tenía planes de iniciar un negocio, solo estaban investigando para su doctorado. PageRank sigue siendo el factor principal en el algoritmo de búsqueda de Google hoy en día y, al final, Larry Page nunca terminó el doctorado debido al gran éxito de su motor de búsqueda.
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Larry Ellison
Ellison es considerado un dinosaurio de la tecnología estadounidense. Datos de Forbes señalan que en el último año su riqueza creció alrededor de 150 mil millones de dólares. Sin embargo, antes de gozar de la bonanza, pasó tiempos difíciles siendo un hombre divorciado que había decepcionado a su esposa, abandonado la universidad y que llegó a vivir en un velero con su gato.
Su familia y las figuras más importantes a su alrededor querían que se convirtiera en doctor porque esa carrera era “el pináculo de las profesiones”. Desafortunadamente las clases de anatomía lejos de ser fuente de inspiración le parecieron una tortura.
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Tiempo después, su esposa le pidió el divorcio expresando su decepción al sentir que Larry carecía de ambición en la vida. La deserción escolar, los trabajos y los planes que tenía -como ser instructor de escalada o comprar un barco- eran muy distintos a las expectativas de su pareja o sus seres queridos. Con ese par de duras lecciones, se propuso no volver a confundir sus deseos personales de los sueños de los demás.
Ellison prefirió trabajar con computadoras en lugar de pacientes y desarrolló su idea de diseñar una base de datos que pudiera guardar datos de formas nuevas y más rápidas. Así formó su propia empresa y dicho negocio se convirtió en Oracle Corp., una de las empresas de tecnología más grandes del mundo.
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