En octubre de 2020 Lamborghini cumplió sus primeros 10 años en el país, durante los cuales se ha posicionado como la principal marca de autos exóticos de lujo. Para celebrar este aniversario se presentó la edición limitada Messico Dieci, compuesta por cuatro sorprendentes autos de la firma italiana que fueron inspirados por la cultura y tradiciones en México.
Basado en el Huracán EVO, estos vehículos llevan el nombre de ‘Vita’, ‘Morte’, ‘Sogno’ y ‘Tempo’, mismos que se vendieron en un solo día.
Lo anterior es signo del análisis que realiza Manuel Sainz, director Comercial y socio de Gran Chelem, quien en conversación con Forbes Life asegura que, cuando de autos exóticos de lujo se trata, los mexicanos gustan mucho de las ediciones especiales. “Es cuando más se pelean los autos”, sostiene.
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Esto se debe a que los clientes nacionales, generalmente, buscan en su auto un diferenciador o característica única, con respecto al modelo que pueda tener otra persona.
Para ello no importa el precio a pagar, pues este sector no se mueve por temas económicos o tipos de cambio peso-dólar.
“Estamos en un mercado muy peculiar. Llevo 10 años en esto y sigo sin entender cómo funciona”
Manuel Sainz, director Comercial de Grand Chelem.
Lo que sí es un hecho es que los clientes en el país tienen un gusto particular por este tipo de vehículos de gran valor, así como por sus estilizadas y portentosas líneas deportivas.
En toda Latinoamérica, México se ha posicionado como el número uno para este segmento automotriz, lo cual ha contribuido a que en la actualidad existan cinco de estas marcas en el país: Lamborghini, Ferrari, McLaren, Aston Martin y Bentley.
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En palabras del entrevistado, estos sellos podrían considerarse como autos exóticos de lujo en México; sus precios pueden comenzar en los 280,000 dólares y de ahí hacia arriba: su valor alcanza varios millones de dólares.
Si bien todas estas marcas pertenecen al segmento de los autos deportivos, lo cierto es que cada una busca llegar a un tipo de cliente distinto. Mientras que Lamborghini es un auto muy agresivo en su manejo y líneas exteriores muy exóticas; otras, como Aston Martin, van encaminadas a un gusto mucho más refinado, con el uso de materiales y terminados más elegantes.
Gusto por los autos exóticos de lujo SUV
Es claro que la marca más vendida en el país –sostiene el representante de Grand Chelem– es Lamborghini. De éstos circulan en territorio nacional alrededor de 350 unidades. En segundo lugar le sigue Ferrari.
Pero ahí ha sobresalido un hecho particular, pues el auto de mayores ventas en México no es un superdeportivo con las líneas características y agresivas de la firma de Sant’Agata Bolognese; se trata de un modelo más discreto del segmento SUV (Sport Utility Vehicle), el cual si bien mantiene el manejo audaz, posee un diseño menos ostentoso.
“No sé cuánto sepas. Pero para nosotros fue un éxito la camioneta Lamborghini Urus. Ese fue el vehículo que nos permitió posicionar a la marca como la número uno en el país en autos exóticos de lujo. Dos de cada tres Lamborghini que se venden en México son de este modelo”, resalta Manuel Sainz.
Dicha SUV posee las prestaciones de un superdeportivo, complementadas con las comodidades de una camioneta en donde caben cinco personas. Es decir, está muy alejada de un biplaza agresivo como el Huracán o Huracán Spyder —los cuales complementan la triada de vehículos más vendidos en el mundo por la marca italiana—.
De ahí se puede deducir un hecho: a los mexicanos les gustan las camionetas.
Por ello, Gran Chelem, firma automotriz que representa en México alrededor de ocho marcas de autos exóticos de lujo, tiene buenas expectativas para con la reciente llegada al país de la SUV de Aston Martin DBX, primer modelo de esta categoría del fabricante inglés.
Estamos esperando resultados muy buenos con ella, asegura el entrevistado. De inicio llegan un total de 12 de estas unidades y –de acuerdo con las expectativas de Manuel Sainz– esperan que puedan posicionar entre 18 a 20 camionetas de Aston Martin anualmente en México.
Con ello buscan la preferencia de los clientes mexicanos, que en la última década se han vuelto más conocedores de estos exclusivos autos, y los demandan cada vez más.
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