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Bien fría, en lata o botella de vidrio, no hay duda de que la cerveza es uno de los brebajes más queridos y conocidos en el mundo. Actualmente encontramos en el mercado un sinfín de variedades, sabores, texturas y formas de preparar cerveza; sin embargo, no todos conocen el origen de esta bebida tan apreciada.
Para conmemorar el Día Internacional de la Cerveza te contamos sobre su origen y evolución hasta nuestros días.
¿Qué es la cerveza?
Para entender el origen de la cerveza es importante que primero sepamos qué es. La cerveza, además de ser uno de los elixires más antiguos, es una bebida alcohólica fermentada a partir de agua, malta, lúpulo y cebada. Se considera que después del agua y el té es una de las bebidas más consumidas en el mundo. A esto se suma que con el paso de los años los maestros cerveceros han añadido otros ingredientes para cambiar su sabor, textura y consistencia.
Origen de la cerveza
De acuerdo con un artículo del Centro de Estudios Mexicanos UNAM-Boston, la primera evidencia que se tiene del origen de la cerveza es de una cueva en Israel, localizada cerca de lo que hoy es Haifa y data de 13 mil años atrás, cuando se encontraron agujeros en el piso que contenían restos de semillas que fueron deformadas por la fermentación, “semillas y cereales blancos que se deformaron por la fermentación, así que en cierto sentido es la primera evidencia de usar semillas para crear bebidas alcohólicas”.
Hay quienes afirman que la cerveza proviene de Mesopotamia y Egipto.
En el caso de Mesopotamia se dice que incluso los sumerios tenían a una diosa de la cerveza nombrada Ninkasi, hija de Enki, dios de las aguas, la fertilidad y la sabiduría, y de Ninhusarg, diosa madre que representaba a la Tierra.
En la mitología se dice que Ninkasi nace de la boca de Ninhusarg y se le conoce como “la que nace del agua espumosa”. De su himno, creado en 1800 A.C. se describe con detalle una receta para realizar cerveza.
En el caso de Egipto, se dice que ellos perfeccionaron la receta original al agregar malta y fue considerada un regalo de los dioses, por ello atribuían su invención al dios Osiris.
En Bélgica se han encontrado datos de que los monjes fueron los primeros en añadir el lúpulo a la bebida y comenzaron a elaborar diferentes tipos de cerveza y graduaciones. Versiones de la historia de la cerveza indican que fue el maestro cervecero Gambrinus, de la corte de Carlomagno, quien descubrió el lúpulo.
Llegada a México
No fue sino hasta 1544 que la cerveza elaborada a partir de cebada hizo su aparición en México cuando Alfonso Herrera, miembro de la expedición de Cortés y emisario de éste ante Carlos V pidió la autorización del monarca para producir cerveza.
El lugar elegido fue las faldas del Iztaccihuatil, en la hacienda llamada “El Portal” con el objetivo de aprovechar las “puras y cristalinas” aguas del deshielo, actualmente conocido como Amecameca y aunque se trajeron a maestros cerveceros europeos no existían las condiciones para trabajar y los costos eran elevados, así que se optó por importarla.
Fue hasta el siglo XIX cuando la industria cervecera comenzó a cobrar relevancia en México y se fundaron diversas cervecerías como La Pila Seca (1825) o La Candelaria (1849). Fue en 1965 cuando empezó a funcionar la Compañía Cervecera Toluca y México.
Fue durante el Porfiriato que inversionistas extranjeros introdujeron al país tecnología para la producción de cervezas dando origen a diversas marcas que se consolidaron en el mercado mexicano y que existen hasta la fecha.
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