Si viene de estudiar negocios o un MBA, debe recordar las teorías de Pankaj Ghemawat sobre globalización (si… las tres A’s) que justifican al Arbitraje -producción basada en economías de escala- como ‘detonante’ del comercio actual, y que al final convirtió a China en el país ‘fabricante’ del mundo. 

Y como ya es costumbre en esta década… otra verdad absoluta que se rompe.

Esta vez a partir de la política ‘Zero Covid’ China que sigue cerrando puertos y fábricas, barcos atracando semanas por el mar retrasando temporadas comerciales, inflación desbordante, el Tío Sam fortaleciendo su moneda, una guerra llena de dolor e incertidumbre… es mejor detener la lista para no tentar al destino. 

El sistema de comercio global es fuerte en papel pero débil en la práctica, basta con ver las listas de espera para comprar coches, celulares, bolsos o aguacates. Después de buscar en seis tiendas Rolex en Suiza, que en principio es la mismísima cuna de la relojería, confirmé los chismes de TikTok: la marca insignia de esta industria hoy día tiene una disponibilidad de 0% (no es error tipográfico).

Un momento donde los negocios (sin importar tamaño) están llevando el ‘estiramiento financiero’ a un nuevo nivel, preparándose globalmente para una adaptación tarifaria de salarios, materias primas, y logística sin precedentes que implicará precios más altos para el consumidor en 2023, algo que las grandes corporaciones buscarán evitar a toda costa y el resto de jugadores del mercado lo tendrá como inevitable y necesario.

Sin embargo empresarios y ejecutivos descubren que estos estiramientos terminarán cediendo y habrá que tomar medidas con ‘mayor calado’ que evolucionen el modelo de sus negocios. Incrementar la inteligencia artificial, producción sustentable, o venderle directamente al consumidor… todo aquello que genere disminución de costos y desarrolle eficiencias contundentes.

 Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Cambiando una de las principales reglas del juego de ‘Pensar Global – Actuar Local’ a ‘Pensar Local – Actuar Global’ o Nearshoring (el concepto del momento).

De acuerdo con una encuesta desarrollada por Deloitte y ABB con empresarios en Estados Unidos y Europa, siete de cada 10 compañías planean invertir en capacidades de producción más cercanas a sus países de origen como resultado de las turbulencias globales de los últimos años. Una tendencia que puede terminar cambiando para siempre el comercio multinacional.

Por supuesto los ojos están en los vecinos cercanos a los grandes consumidores. “La pérdida de China es la ganancia de México, una cadena de suministro global transformada por el nearshoring significa que la inversiones que aumenten productividad bajo proximidad serán para este país una oportunidad única en su historia para consolidarse como socio comercial central de Estados Unidos” afirmó la semana pasada Brian Moynihan, presidente de Bank of America.

Al otro lado del océano denominación de origen y manufactura local son protegidos por gobiernos y elegidos por consumidores. De acuerdo con Kantar el 74% de los europeos afirma preferir comprar algo proveniente de la comunidad de países. Hay que aceptarlo: la calidad europea es difícil de superar. 

Es inspirador llegar a los talleres de Fendi en Milano y ver artesanos octogenarios enseñándole a armar un bolso peekaboo a los recién llegados de Central Saint Martins. Una escena que se repite en casi todas las categorías Premium y masivas.     

En el viejo continente los países preferidos para desarrollar Nearshoring se ubican en centro / este de Europa, norte de África, y Turquía que en medio de la inflación desproporcionada agrega escalabilidad, sin embargo la Comisión Europea actualmente tramita una ley para incentivar las licencias de Indicaciones Geográficas y Denominación de Origen. ‘Europeo compra Europeo’.

Las multinacionales están aprovechando esta tendencia para desarrollar la nueva generación de fábricas enfocadas en productos sustentables (como las de Ford en Alemania y España que aspirar vender 600.000 coches eléctricos anuales a partir de 2026) y por supuesto para llevar la automatización a nuevos niveles. 

De acuerdo con la Federación Internacional de Robótica el número de robots industriales a nivel mundial por cada 10.000 empleados pasó de 176 unidades en 2015 a 255 en 2020, llegando a superar los 600 de cara a 2030. 

Pareciera que el nuevo ‘nombre del juego’ se llama ‘lograr los productos de siempre reemplazando los barcos y aviones que atraviesen mares y océanos’. Este puede ser singularmente el momento ‘gamechanger’ de México para finalmente lograr pertenecer al club de las diez economías mas grandes del mundo, proyección que ha hecho desde el Fondo Monetario Internacional hasta las famosas ‘Big Four’.

Llevo casi quince años asesorando constantemente a empresas locales y multinacionales en México en prospectiva e innovación. Créame cuando digo que los grandes jugadores ya tienen una estrategia para crecer sus negocios a partir de ser Glocales.   

Recuerdo hace tres años cuando el mejor negocio que había era traer un conteiner de China. Que década tan contundente la que estamos viviendo. No cree? 

Suscríbete a Forbes México

Contacto:

*El autor es consultor global de negocios; enfocado en consumo masivo, estrategia competitiva, innovación, y prospectiva.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México

 

Siguientes artículos

Distintivo de integridad empresarial
Por

Son loables algunos esfuerzos gubernamentales para combatir y erradicar corrupción.