Este jueves, la Cámara de Diputados avaló en lo general con 417 votos a favor, 29 abstenciones y uno en contra del dictamen de reformas en materia laboral, sin embargo, a decir de expertos, podría haber riesgos en la implementación de esta actualización del marco de condiciones para trabajar en el país.
El dictamen elimina las Juntas de Conciliación y Arbitraje para crear tribunales y el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL), también se podrán registrar contratos colectivos a nivel nacional y cambiará los lineamientos para el registro de organizaciones sindicales.
Para Jorge Sales Boyoli, abogado experto en temas laborales, había cinco ejes que la reforma debía abordar:
1. Suprimir la “trampa de control” donde el Poder Ejecutivo conserva la autorización/concesión de los registros colectivos, contrariando los derechos internacionales de libertad de asociación sindical.
2.- Retirar la excepción concedida a los sindicatos, donde, incentivando las extorsiones, se les releva para acudir al procedimiento prejudicial conciliatorio en materia de emplazamientos a huelgas y demandas de titularidad.
3.- Enfatizar y detallar el derecho a la no sindicalización como parte de la libertad sindical consagrada en ordenamientos internacionales de los que México forma parte.
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4.- Aclaración en los tiempos y formas de entrada en vigor de las distintas etapas de la reforma (artículos transitorios) elaborando y afinando una línea del tiempo sin contradicciones.
5.- Considerar las normas del debido proceso para la resolución de juicios anteriores a la entrada en vigor de la reforma en cuestión, mismos que deberán ser resueltos por un ente tripartita y no por un Juzgado o Tribunal Laboral.
En materia de tiempos, destaca que, se deberán revisar 104 reservas de 50 diputados, y sólo así se avalará en lo general y en lo particular.
Presiones de EU
En opinión de Juan Francisco Torres Landa, socio de la firma de abogados
Hogan Lovells, el dictamen es resultado de la presión del gobierno americano por incluir en el marco mexicano una mayor libertad sindical para los trabajadores, pues el 2 de abril Nancy Pelosi advirtió que no habría una firma del acuerdo de libre comercio hasta no ver una reforma laboral en el país.
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“El punto central es la libertad sindical, los trabajadores podrán pertenecer al sindicato que elijan y una empresa podrá tener la participación de más sindicatos, pero quedan cuestiones pendientes, como la excepción de los sindicatos a estar sujetos a la Ley de Impuesto Sobre la Renta, esto implica que no tienen contabilidad y no están sujetos a auditorías”.
En términos de outsourcing, Torres Landa considera que hoy el país tiene reglas claras en materia de tercerización, por lo cual no es necesario un marco más rígido, sino una fiscalización y castigo más severo para las empresas que utilizan estas prácticas para evadir impuestos.
Para el abogado, algunos de los temas preocupantes acerca de la implementación del nuevo marco regulatorio para sindicatos están relacionados con las señales que envían a los inversionistas algunos fenómenos, entre ellos:
1. El bloqueo de vías férreas encabezado por Integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Estos, según un cálculo de Banorte, tuvieron un impacto 0.11% del Producto Interno Bruto (PIB) de México en 2019.
2. El desempeño Arturo Alcalde Justiniani, padre de la titular de la Secretaría del Trabajo, como asesor de diversos sindicatos relacionados con las huelgas en maquiladoras de Matamoros, Tamaulipas.
3. La creación de una nueva central obrara con mayor poder que la CTM.
“Hemos visto que fenómenos como la huelga en Tamaulipas estuvieron promovidos por personas que ni siquiera pertenecen a sindicatos, ahora la prioridad tras la aprobación de la reforma será asegurar condiciones sanas para evitar el abuso de los líderes sindicales que se ha visto en el pasado”, añade.
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