Por: Francisco Lira
El nearshoring hoy en día es un cambio de estrategia del comercio internacional en donde las empresas buscan fabricar sus productos más cerca del mercado en el que los venden, esto con el objetivo de reducir costos de producción, mejorar la eficiencia en los procesos empresariales y aprovechar la cercanía geográfica entre países. Con esto, las empresas pueden beneficiarse de una reducción en los costos de transporte, tener mayor flexibilidad, capacidad de respuesta y una mejor gestión de la calidad y el riesgo.
En los últimos años, y derivado principalmente de las lecciones aprendidas durante de la pandemia por COVID-19 y la guerra en Ucrania, el nearshoring adquirió mayor relevancia, pues la forma en la que antes operaban las empresas cambió radicalmente y puso en evidencia la necesidad de contar con cadenas de suministros más resilientes y flexibles, sobre todo en un entorno empresarial tan cambiante. No olvidemos que durante la crisis sanitaria, China cerró su mercado y cientos de países, incluido E.U.A, —el principal proveedor y receptor de servicios externalizados a nivel mundial —.
Si bien en décadas anteriores la tendencia fue el offshoring (llevarse las fábricas a China para producir a menor costo), ahora la preferencia es el regreso hacia zonas geográficas más cercanas, un factor altamente positivo para México por su cercanía con Estados Unidos y Canadá, además, México tiene los criterios apropiados para posibilitar el flujo comercial a un mejor precio gracias a su alto nivel de expertise en la manufactura y la industria.
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Todo lo anterior se ve reflejado en el «Reporte Mercado Industrial Nearshoring en México» de CBRE, el cual precisó que al tercer trimestre de 2022, la demanda por terreno y Commercial Real Estate — la absorción bruta por nearshoring —, alcanzó 1 millón 200 mil m², lo que representa casi el doble del dato anual con el que cerró en 2021. Y de acuerdo a la misma compañía, la concentración de estas inversiones en los estados correspondió a la zona norte del país con un 68% de la concentración y donde el centro y sur del país también mostraron participación.
La geografía mexicana está posicionada de manera estratégica, y la oportunidad no se puede desaprovechar, especialmente en el contexto actual en el que diversas acciones se vieron afectadas (como lo es la logística del transporte) y es importante llegar a soluciones de forma rápida. De este modo, será importante estar atentos a lo que sucederá después de la Convención Bancaria celebrada el 16 y 17 de marzo en Mérida, Yucatán. Ya que la temática de este año fue “Retos y oportunidades: inclusión, sostenibilidad y nearshoring” y seguro que será un espacio con múltiples visiones y soluciones sobre cómo podemos aprovechar la oportunidad como gremio y país para fomentar el desarrollo mexicano.
Contacto:
Francisco Lira, CEO de Banco Sabadell
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.
