Por: Juan Francisco Aguilar*
Para que una sociedad continúe creciendo, requiere como base una atención médica y una educación sólida. Hoy, estos sectores se están adaptando rápidamente a la “nueva normalidad” y la tecnología se ha convertido en su aliado. La adopción de la Transformación Digital significa cambios positivos para la atención de la salud y la educación, con ella tendremos la capacidad de cerrar las brechas de oportunidades y preparar a la fuerza laboral para los retos del futuro.
En primer lugar, la salud. Imaginemos el potencial que se lograría en cuestión de medicina preventiva si fuera posible ampliar el alcance de la atención médica mediante la tecnología. De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), tan solo el 30% de la población en América Latina y el Caribe no tiene acceso a servicios de salud por razones económicas, y el 21% no busca atención debido a barreras geográficas.
Se trata de romper barreras y crear un mundo donde las personas pasen menos tiempo trasladándose a citas médicas o esperando muchas horas en salas de espera a que los atiendan, porque pueden tener consultas desde sus casas; donde cada paciente tiene un historial médico continuamente actualizado por equipos de cuidado, dispositivos y reportes personales; donde tableros personalizados ayudan a analizar los datos del paciente en tiempo real; y donde los costos y las complicaciones de enfermedades crónicas disminuyen mientras monitoreos remotos de pacientes se convierten en una práctica rutinaria.
Los avances en la tecnología de la salud son cada vez más relevantes. Hoy tenemos robots capaces de realizar tareas de forma remota y segura como pruebas de ultrasonidos, toma de muestras o escuchar los sonidos producidos por los órganos de un paciente; drones autónomos que realizan entregas de muestras médicas y material esencial como medicamentos; con tecnología de reconocimiento facial es posible realizar lecturas de signos vitales; y a través de dispositivos como los weareables combinados con aplicaciones, los doctores pueden monitorear enfermedades no transmisibles y el estado físico del paciente.
Todo esto se está logrando con el objetivo de acercar más a las personas con los médicos, de proveer un cuidado más integrado y de generar mejores resultados de salud.
Echemos un vistazo a la educación. Las escuelas han tenido que cambiar a plataformas de aprendizaje en línea en cuestión de semanas. En México, más de 30 millones de estudiantes, desde la primaria hasta la educación superior,[1] migraron a este formato. Ha sido una enorme curva de aprendizaje tanto para maestros como para estudiantes. Al igual que al trasladar una fuerza laboral al sistema remoto, hay un periodo de clasificación de prioridades en el que necesitamos que todo funcione correctamente para luego innovar y desarrollar una experiencia increíble.
Este es el caso de México, donde Dell Technologies ha desarrollado un programa para impulsar la educación en estudiantes de secundaria. A través de nuestra Solución Educativa 360°, los alumnos pueden tomar más de 10,000 contenidos y laboratorios virtuales, sin la necesidad de contar con internet para funcionar al tener un servidor por escuela con los contenidos precargados, permitiendo a los estudiantes que su aprendizaje continúe de forma remota.
Con un mayor conocimiento, podemos trabajar para que el aprendizaje a distancia se realice de manera correcta a fin de poder proporcionar acceso equitativo para todos. En México, el 74% de los usuarios de internet están interesados en estudiar, 45% de ellos con preferencia de hacerlo online.[2] Debemos seguir avanzando para cerrar la brecha de competencias y garantizar que la fuerza laboral del futuro esté lista para el trabajo digital, sin importar dónde resida esta fuerza laboral.
Es necesario que analicemos cómo la tecnología puede crear una sociedad más equitativa. Sabemos que estos cambios vendrán con sus propios retos, pero también llegan con oportunidades que marcarán un camino hacia una transformación de la salud y la educación más eficientes y accesibles para todos. Nuestras comunidades no se pueden dar el lujo de que dejemos pasar esta oportunidad.
[1] Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE)
[2] Asociación Mexicana de Internet 2018
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Juan Francisco Aguilar es director general de Dell Technologies*
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.
