Los abogados corporativos se han convertido en una de las piezas clave en el nearshoring. Y es que los profesionales del derecho son uno de los primeros asesores de los inversionistas que son atraídos por la relocalización de las cadenas productivas en México.
Rebeca García López, socia de White & Case, asegura que los abogados son la puerta de entrada de los inversionistas interesados en reubicar sus cadenas de producción en México. ¿La razón? Son los profesionales que tienen pleno conocimiento de las regulaciones locales: “Podemos guiar, de forma adecuada, al inversionista para [que sea capaz de] navegar por cualquier reto u obstáculo que se pueda presentar”, dice, en entrevista. Para lograrlo, explica, es de suma importancia conocer los tratados internacionales para determinar cómo estructurar estas operaciones.
La cercanía de México con Estados Unidos, la infraestructura industrial que ha desarrollado en los últimos años y el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) lo colocan como el destino natural para aprovechar el traslado de las cadenas productivas de Asia a América, fenómeno conocido como nearshoring.
Grupo Bursátil Mexicano (GBM) estima que, si México sustituye el 5% de las exportaciones de Estados Unidos a China en 10 categorías relevantes, las exportaciones mexicanas podrían crecer y dar unos 22,900 mdd adicionales por año, equivalente al 1.77% del Producto Interno Bruto (PIB).
Algunos de los sectores económicos que podrían mostrar mayor dinamismo durante estos años debido al fenómeno del nearshoring, opina García López, son el de infraestructura (debido a la necesidad de crear nuevos espacios para las plantas industriales) y el sector financiero (por los requerimientos que habría en términos de financiamiento para los proyectos).
Las condiciones políticas de un país como México pueden alentar o desalentar las inversiones (relacionadas con el nearshoring), hasta cierto punto, fácilmente. Debido a esto, comenta el abogado Luis Cervantes Castillo, socio de Cervantes Díaz Abogados, es fundamental explicar con claridad a los inversionistas cuáles son las ventajas, desventajas, retos y condiciones legales a las que se expondrán en caso de que decidan invertir en México. “Las empresas difícilmente invertirán de su propia bolsa, por lo que buscarán financiamiento y fondeo. Cualquier relación crediticia contractual debe llevar acompañamiento legal […] Ésta también es buena noticia para los abogados”.
En cuanto a los desafíos que traerá consigo este fenómeno económico para un país en vías de desarrollo como México, en el que existe cierto grado de corrupción y retraso burocrático en cuanto a “tramitología”, comenta, uno se encuentra en la necesidad de tener como aliados a profesionales que conozcan profundamente los pasos a seguir para llevar a cabo las estrategias de inversión. “Lo barato sale caro. Entonces, si van a tomar la decisión de emprender en una fuente de producción de esta naturaleza […], lo primero es rodearse de equipos profesionales que mejor puedan ayudar”.
Juan Ibáñez, socio de Ibáñez Parkman, refiere que, si no se respetan las reglas de inversión y la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los capitales pueden no llegar al país, pues se requiere certeza jurídica.
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“México representa una opción extraordinaria en el nearshoring, por la mano de obra calificada y por los procesos estandarizados, pero, indiscutible e inevitablemente, lo que necesita el país es Estado de derecho”, asegura el abogado.
El nearshoring representa una oportunidad histórica para México, porque puede potenciar su crecimiento económico y ampliar sus relaciones comerciales con los países cercanos. Esto opina la abogada Alejandra Echeverría, socia del despacho Ritch, Mueller y Nicolau.
En este sentido, explica la experta, los abogados son los que proporcionarán a los empresarios la asesoría legal especializada, por su profundo conocimiento en los aspectos legales y regulatorios para establecer operaciones comerciales.
“En el contexto de este fenómeno, las áreas donde hemos visto mayor demanda de servicios son comercio exterior, corporativo, fiscal, compliance, inmobiliario y financiamiento”, dice, en entrevista.
Para que el país pueda aprovechar profundamente las oportunidades que ofrece el nearshoring, agrega la abogada, éste requiere adoptar una política de apertura hacia la inversión y aprovechar los acuerdos y tratados comerciales de los que forma parte. Esto, con el objetivo de facilitar las inversiones y ofrecer certeza a los inversionistas.
“La inseguridad es otro de los retos que enfrenta nuestro país. La inseguridad pública, sin duda, frena las inversiones. Otro reto es la falta de suministro de energía eléctrica, así como la capacidad limitada de su transmisión. Y hay que considerar también la escasez de agua, especialmente en el norte del país”, dice Echeverría.
En este contexto, Forbes México publica su especial anual de “Los Mejores Abogados de México”, el cual pretende reconocer a los despachos legales que se especializan en asuntos corporativos.
La selección de este año está integrada por 17 firmas legales que han sido reconocidas, tanto en el ámbito nacional como en el internacional, como referentes en la atención a los corporativos que operan dentro y fuera de México.
