México todavía se encuentra lejos de los países que lideran la investigación, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF).
El mercado nacional ocupa el lugar 29 a nivel global en investigación clínica, con 226 estudios iniciados en 2018, sobre todo en Oncología, CardioMetabólico y Endocrinología, Autoinmune e Inflamación, Neurociencias, Enfermedades Infecciosas y Vacunas, lo que representa el 1.5% de participación.
“Si se pudiera impulsar a México en el lugar 14, se atraerían más estudios. Tenemos las fortalezas, con infraestructura e investigadores importantes. Sin embargo, hay varios retos, entre ellos simplificar y digitalizar los procesos, reducir los tiempos de una manera clara y contundente, y certeza jurídica”, señaló Garbiñe Núñez, del equipo de investigación clínica de la AMIIF.
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En el primer sitio en investigación clínica se encuentra Estados Unidos, con 4,599 estudios que comenzaron el año pasado, es decir, una participación de 29.8%; seguido por China, con 3,501 (22.7%); Japón, con 924 (6%); Francia, con 892 (5.8%); y Reino Unido, con 877 (5.7%), de acuerdo con datos citados por dicha asociación.
Para Cristóbal Thompson, director ejecutivo de la AMIIF, durante el presente gobierno se estima una inversión acumulada de 2,000 millones de dólares (mdd) en investigación clínica en México, siempre y cuando mejoren los procesos de aprobación para incrementar la competitividad y atractivo del mercado nacional.
El especialista señaló que lo más importante para atraer inversión es disminuir los tiempos de aprobación desde que inicia el trámite de un nuevo tratamiento hasta que se atiende al primer paciente, lo cual lleva 255 días a las farmacéuticas, mientras que en los países más avanzados en el tema se toman máximo 120 días.
Respecto al rezago que existe en los trámites y permisos por parte de la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), Thompson indicó que trabajan con las autoridades correspondientes para atender dicha problemática.
“Siempre que hay un rezago hay un impacto y por eso estamos trabajando en coordinación con la autoridad para ir mejorando el tema. También hay que reconocer que la actual administración recibió un rezago del gobierno anterior”, comentó.
La cadena de valor de la industria farmacéutica genera alrededor de 87,000 empleos directos y más de 400,000 indirectos en México, al tiempo en que aporta casi 7% del PIB manufacturero en el país.
