Si bien el nearshoring representa una oportunidad única para México, no es lo único a lo que debe de apostar el país, ya que es necesario trabajar también para que la inversión nacional crezca a mayor velocidad, además de poner el “foco” en el Tren Transístmico, ya que es el proyecto más importante de esta administración y puede reducir la desigualdad en México.

El director general de BBVA México, Eduardo Osuna, aseguró la relocalización de empresas aportaría 1% de crecimiento adicional al PIB por año, pero derivado de esto se podría registrar un incremento de tres puntos porcentuales por año en la inversión privada, un aumento anual de 400,000 empleos adicionales y la creación de clases medias.

“La mayor oportunidad no está en conseguir que haya mucho nearshoring en México, es que la inversión nacional publica y privada crezca a mayor velocidad”, comentó durante la inauguración de la Reunión Nacional de Consejeros Regionales.

De acuerdo con el banquero, en la actualidad el 75% es inversión que se ejerce en el territorio nacional es privada nacional, el 3% es pública y sólo el 12% de inversión extranjera directa, por lo que la gran tarea de los empresarios mexicanos y del gobierno es cómo impulsar la demanda interna.

Director general de BBVA México, Eduardo Osuna Foto: Roberto Noguez

El directivo destacó que hay que poner el foco en el Transístmico, ya que “es el mejor proyecto de esta administración, que puede reducir la desigualdad de México y sobre todo aprovechar los incentivos a la inversión que se acaban de anunciar”.

Y es que, para el director de BBVA México, este es un proyecto de 25 a 30 años, el cual puede ser un detonante del Sur muy importante, pero, sobre todo, permitirá aprovechar los recursos que hay en esta región del país.

Osuna dijo que también es necesario detonar más proyectos de infraestructura local, ya que existen muchos cuellos de botella en estados y ciudades, lo cual generaría desarrollo de compañías constructoras.

Además de promover las asociaciones público-privadas ante la falta de capacidad de inversión del gobierno estatal y federal; combatir la informalidad, dado que si el 55% de mexicanos se formalizan en automático habrá más demanda interna, más gente que tendrá acceso a los servicios bancarios y, por lo tanto, más crédito y más un ciclo virtuoso.

Por su parte, el presidente de Grupo BBVA, Carlos Torres Vila, comentó que la inversión privada que puede atraer el nearshoring representa una oportunidad histórica para México, con un enorme potencial de crecimiento.

“Para poder aprovechar plenamente esta gran oportunidad que tiene México, es crucial que se dé el entorno que permita que venga esa inversión, atraer esa inversión y eso requiere que se resuelvan muchos cuellos de botella”, dijo.

Sigue la información sobre los negocios y la actualidad en Forbes México

Torres Vila expuso que hay una falta de infraestructura, de mano de obra y de energía, sobre todo limpia, por lo que las políticas públicas son esenciales para que esta inversión pueda ocurrir en la realidad.

“En BBVA estamos preparados para este proceso inversor, estamos preparados para continuar apoyando a nuestros clientes y al país, para que aproveche todo ese potencial”, resaltó el presidente global del banco español.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

 

Siguientes artículos

Merck-fármacos
Merck demanda al gobierno de EU para detener negociación del precio de medicamentos
Por

Merck & Co demandó al gobierno de Estados Unidos en contra de la negociación de precios de medicamentos por violar enmie...