La economía digital, entendida como aquella actividad habilitada y multiplicada por transacciones que tienen lugar en internet, se hace cada vez más presente en la cotidianeidad y facilita el acceso a un universo de bienes y servicios que pueden ir desde la adquisiciónn de bonos gubernamentales, hasta la de productos de consumo final.
Sin embargo, la economía digital no sólo se reduce a la transaccionalidad. Tiene también un importante efecto en términos de creación de mercado, que se caracteriza por facultar la puesta en marcha de novedosas actividades con una importante y disruptiva contribución al aparato productivo nacional.
Ahí, el sector del turismo no es la excepción. Efectivamente, de acuerdo con el INEGI, representaba ya en el periodo prepandémico 8.7% del Producto Interno Bruto (PIB).[1] En cuanto a la generación de empleo, alcanzaba 4.3 millones de empleos en el año 2019.[2] Por ello y su peso en inversiones y otros rubros, reviste una importancia crucial su plena recuperación, para lo cual requiere de la activa contribución de todos los agente involucrados, incluyendo a los formatos tradicionales de hospedaje (hoteles), así como de las novedosas plataformas digitales de alojamiento.
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El uso de estas plataformas no sólo facilita el encuentro de anfitriones dispuestos a ofrecer sus propiedades con los turistas que demandan hospedaje, sino que también interconecta y acrecienta la oferta y la demanda de servicios Alojamiento de Corto Plazo (ACP). De esta manera, funge como motor de la recuperación del turismo en México ante la crisis sanitaria global, al permitir a los anfitriones ser, motu proprio, emprendedores que generan valor a través de sus activos, a la vez que genera derramas en los segmentos restauranteros, el sector cultural y artístico, así como de otros segmentos económicos insertos en la cadena de valor de la actividad turística.
Con respecto a su contribución económica, Alojamiento de Corto Plazo (ACP) generará ingresos totales por $16,691 mil millones de pesos (mmp) en 2021, es decir, 34.3% más que la cifra correspondiente a 2020.
Este acelerado crecimiento en un marcado periodo recesivo deja claro que el sector del turismo se encuentra apalancando su recuperación, en buena medida, a través de las plataformas digitales.
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Reconocer esta creciente aportación de la economía digital en el sector turístico no es suficiente. Resulta también imperante ponderar su contribución fiscal ya que, desde el año pasado, se habilitó el pago de impuestos por parte de empresas extranjeras que prestan estos servicios a usuarios por medio de aplicaciones en México.
Esta determinación permite anticipar que, en un escenario de plena contribución tributaria por parte de todos los agentes participantes en la oferta de este segmento, se podría recaudar el equivalente a $4,688.3 mdp[3] por concepto de IVA, ISR e Impuesto sobre Hospedaje (IHS)[4] en 2021, alrededor de 28% de los ingresos totales del mercado.
Para alcanzar este monto es de esperar que queden incorporados todos los intermediarios digitales de alojamiento. Hoy, es posible detectar que únicamente 3 de los 14 jugadores identificados están registrados ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), incluso nueve meses después de que entró en vigor el régimen fiscal aplicable. De alcanzar la incorporación total de los agentes económicos del sector, el referido escenario de plenitud tributaria se alcanzaría y representaría 4.7% de la recaudación total esperada, es decir, $221.5 mdp.
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Fuente: The Competitive Intelligence Unit, 2021
Es fundamental reconocer que estos nuevos gravámenes afectan las decisiones de los usuarios de plataformas digitales al momento de elegir sus alojamientos, al encontrar alternativas con precios libres de obligaciones. Por eso, un escenario de plena tributación eliminaría este fenómeno de distorsión de precios y competitiva, a la vez que se incrementaría la ventana de oportunidad contributiva y facilitaría la recuperación del sector.
La economía digital no sólo representa un mercado creciente en términos de la oferta de alojamiento turístico y por ello una enorme oportunidad para aplancar su dinamismo y recuperación, sino que, además se ha consolidado en un corto tiempo, por su importante contribución fiscal.
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[1] INEGI, “Cuenta Satélite del Turismo de México, 2019”. Disponible en: https://bit.ly/3xb6QYh
[2] Gobierno de México. “4 millones 308 mil empleos registró el sector turismo al segundo trimestre de 2019”. Disponible en: https://bit.ly/3uzWjEk
[3] Este monto incluye la contribución correspondiente a los servicios prestados por intermediarios/plataformas y anfitriones considerando un IVA de 16%, ISR de 10% e ISH de 3.5%.
[4] El Impuesto sobre Hospedaje (ISH) es aquel que los propietarios y los anfitriones de ofertas de ACP deben pagar por alquilar una habitación o una propiedad. El monto y requerimientos del impuesto varían según las entidades del país. La contribución del ISH se calcula multiplicando la tasa por el valor del servicio ofrecido sin considerar el IVA.
Contacto:
El autor es director general de The Competitive Intelligence Unit y Nomismae Consultin
E-mail: [email protected]
Twitter: @ernestopiedras
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