En el caso Línea 12 se investigará el presente, pero también el pasado. La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que el peritaje tanto de la Fiscalía General de Justicia como de la empresa noruega DNV se enfocará en esclarecer las razones del colapso de una trabe en el viaducto elevado de la línea dorada, que ha causado la muerte de 25 personas, pero también investigará desde el diseño, la construcción, rehabilitación y hasta el arrendamientos de los trenes.
“No solamente es el peritaje directo asociado a la trabe, que tuvo este grave problema, sino también a todo lo que significa la realización de la Línea 12 y los trenes que están rentados (…) nuestra responsabilidad por encima de todo es atención a las víctimas y, después, que se conozca la verdad, que haya responsables y la reparación integral de la Línea 12 del Metro”, dijo la mandataria capitalina en conferencia de prensa desde el Antiguo Palacio del Ayuntamiento.
Forbes México publicó este jueves que la Líneas 12 se pensó con 20 estaciones subterráneas y solamente tres en viaducto superficial, es decir, a nivel de calle. Sin embargo, debido a insuficiencia presupuestal, el gobierno del entonces Distrito Federal y el consorcio constructor conformado por ICA, Carso y Alstom, acordaron una propuesta que racionalizara los recursos, por lo que se optó por hacer nueve subterráneas, nueve elevadas y dos superficiales.
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Por ello, Sheinbaum Pardo insistió esta mañana que el peritaje del accidente que realice tanto la Fiscalía General de Justicia como la empresa noruega DNV será un “análisis denominado causa raíz”, para poder conocer en términos generales el estado de la Línea 12 desde su construcción hasta el accidente del lunes pasado, que mantiene a 40 personas hospitalizadas y 52 que fueron dadas de alta, aunque con lesiones permanentes.
Sobre la remoción de escombros, la mandataria precisó que solamente se han retirado del lugar del siniestro los dos vagones, el balasto (la piedra que va en las vías) y algunos materiales menores, pero la trabe permanecerá en el sitio hasta que los peritos de la Fiscalía y los peritos independientes de la empresa noruega DNV concluyan con sus evaluaciones.
El martes, un días después del accidente, la Fiscalía capitalina informó que en sus peritajes participarán ingenieros topógrafos, civiles y estructurales, especializados en aceros; geólogos especialistas en subsidencias (hundimientos) para desarrollar estudios de geotecnia, mecánica de suelos, cálculo estructural, resistencia de materiales y “todos aquellos que resulten indispensables para identificar el origen del hecho”.
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Sin embargo, también se hará una revisión en lo administrativo, para lo cual se investigarán “contratos de obra y supervisión, bitácoras de mantenimiento, empresa constructora y supervisora y la solicitud de información a todas las áreas intervinientes para el deslinde de responsabilidades, así como, el cálculo y la evaluación final de los daños”.
Incluso la mañana del martes, apenas unas horas después del accidente, el canciller Marcelo Ebrard dijo que estaría en “entera disposición de las autoridades” para colaborar en la investigación sobre uno de los peores siniestros ocurridos en el Metro, toda vez que fue durante su gobierno que se construyó y se puso en operación la Línea 12, misma que en marzo de 2014 fue cerrada por el gobierno de Miguel Ángel Mancera debido a las fallas que presentaba desde 2012 y que ponían en riesgo la operación y la seguridad de los usuarios.
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