El panorama político en el país estará marcado por la sucesión presidencial y las elecciones más grandes de la historia de México.

El Instituto Nacional Electoral (INE) dice que las elecciones de 2024 serán reconocidas como las más grandes de la historia de México, pues se disputarán 20,367 cargos entre la elección federal y las locales.

De acuerdo con el INE, estos comicios no sólo marcan un ejercicio fundamental de la soberanía popular, sino que también reflejan la continua evolución política y social que ha caracterizado a México en las últimas décadas.

Esto también plantea escenarios retadores para el país, principalmente el de la incertidumbre política, además de una serie de riesgos que conllevan unas elecciones de esta talla, en las cuales la contienda central es la presidencia, que se pelea entre Claudia Sheinbaum (Morena, PT y Partido Verde), Xóchitl Gálvez (coalición PAN-PRI- PRD) y Jorge Álvarez Máynez, el candidato de último momento de Movimiento Ciudadano.

PANORAMA INCIERTO

El Centro para Estados Unidos y México del Instituto Baker de Políticas Públicas de la Universidad Rice señala que un punto importante es que se observa un sistema electoral debilitado, por lo que es probable que sus actores políticos cuestionen los resultados de las próximas elecciones del 2 de junio.

Ante este hecho, se espera que Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, interfiera con las elecciones, haciéndolas menos libres y justas.

“El peligro de un conflicto postelectoral es mucho mayor que en 2018 o 2021. Aun así, con el país todavía dividido, la oposición probablemente obtendrá buenos resultados, incluso si finalmente pierde las elecciones. Sin embargo, este entorno político restará valor al entorno empresarial favorable de México y ralentizará las decisiones de inversión”, resalta en su informe anual de perspectivas del país.

Un futuro político equilibrado también dependerá de la participación electoral; cuanto mayor sea la participación, mejores serán las perspectivas para la oposición.

“Una participación deprimida, en la que sólo aparece el voto leal y el gobierno actual inclina la balanza estadística a su favor, probablemente resultará en una victoria de Morena y en un futuro mucho más incierto”, dice.

LAS POSIBILIDADES

El documento del Instituto Baker plantea tres posibles escenarios de los resultados electorales de 2024:

1) La coalición Morena gana las elecciones. La oposición quizá protestaría e, incluso, se movilizaría, pero, al final, reconocería su derrota.

2) La oposición logra una estrecha victoria, que no sería reconocida por Morena. Ambos bandos movilizarían sus bases y habría un periodo de polarización política. En este escenario, las instituciones se mantienen y surgen actores suficientes y legítimos para gestionar el conflicto postelectoral. El resultado sería una transición negociada.

3) La oposición gana y Morena se niega a reconocer su derrota. Cada lado moviliza su base, pero no hay actores suficientes y legítimos para mediar en el conflicto postelectoral, lo que resulta en un colapso de la gobernanza y en un país aun más dividido.

“Al final, casi todos los escenarios potenciales enviarán a México a un mayor grado de incertidumbre política, y esperamos que el retroceso democrático continúe mucho más allá de 2024. Esto podría generar más dudas en Estados Unidos sobre el estatus de México como democracia de libre mercado”, apunta.

Si bien se abren las oportunidades, tanto para Morena como para la oposición, hay quienes señalan que el escenario más probable es la permanencia del partido guinda en el poder.

Control Risks, empresa de consultoría especializada en riesgos, refiere, en su análisis de “Impacto Electoral en México”, que el escenario con probabilidad alta es que Morena gane con respaldo disminuido, pues apunta que, aunque existen candidatos competitivos, las elecciones no despiertan el interés suficiente de la ciudadanía para cambiar el statu quo.

“Esto se traduce en el triunfo del partido en el poder, por la popularidad de AMLO y por el control territorial y de estructuras clientelares de Morena, más que por el entusiasmo que genera la plataforma política de su candidata”, explica.

Y, en una probabilidad media, pone a la oposición con una oportunidad real de triunfo, donde la popularidad de AMLO se mantiene alta, pero hay críticas hacia sus proyectos y políticas públicas que la oposición capitaliza para presentar una candidata y una alternativa de proyecto de nación queinspiran a la ciudadanía para buscar un cambio de ruta.

UN FUTURO

El Instituto Baker plantea en sus perspectivas cómo será la gobernabilidad después de las elecciones del 2 de junio y también dibuja tres escenarios a tener en cuenta, que dependerán del resultado de las elecciones:

1) La oposición gana y Gálvez es elegida presidente, pero ningún bando tiene mayoría. Esto es algo probable.

2) Sheinbaum gana la presidencia, pero el Congreso sigue dividido y, por tanto, no puede cambiar la Constitución. Éste es el escenario más probable.

3) Sheinbaum gana la presidencia y Morena obtiene una supermayoría en el Congreso, suficiente para cambiar la Constitución total o parcialmente. Este escenario es poco probable, pero representaría un serio desafío al orden constitucional de México y sería el “más peligroso”.

Actualmente, Morena tiene mayoría simple en la Cámara de Diputados de México. De los 500 miembros de la Cámara Baja, 201 son miembros de Morena, y 275 pertenecen a la coalición del partido con el Partido Verde (PVEM) y el Partido de los Trabajadores (PT). Morena también posee actualmente el 46% de los escaños del Senado, con el 60% en manos de la coalición.

Ninguno de estos números es suficiente para cambiar la Constitución mexicana, algo que López Obrador ha querido hacer.

LOS RIESGOS DEL PROCESO

Integralia, empresa de consultoría en asuntos públicos, riesgo político y conflictividad social, ha identificado diversos riesgos para el proceso electora, que van desde una probalidad de ocurrencia muy alta, alta y baja:

+ Violaciones reiteradas al marco normativo: actos electorales fuera de los tiempos legales, e injerencia de servidores públicos (incluyendo al presidente) en actividades proselitistas y de

operación política, así como el uso de recursos públicos para fines clientelares. La normativa actual parece haber quedado rebasada por la realidad política. (Muy alta.)

+ Violencia política e injerencia del crimen organizado: ataques a candidatos o personajes políticamente relevantes en las entidades donde dos o más grupos delictivos se disputan el control territorial (buscarán sustituir o continuar sustituyendo a las autoridades como agentes reguladores) e injerencia operativa para beneficiar a candidatos aliados cuando la competencia sea cerrada. (Alta.)

+ Ataques reputacionales a autoridades electorales provocan falta de confianza en los resultados: tanto el INE como el Tribunal Electoral han recibido ataques constantes. La reiterada violación de las reglas resultará en procesos electorales con excesiva litigiosidad, lo que, a su vez, acarreará desgaste. (Alta.)

+ Que se ponga en duda la transmisión pacífica del poder político (y la estabilidad política en general); las condiciones políticas y estructurales hacen que este riesgo tenga probabilidad de ocurrencia baja, por la pluralidad de fuerzas políticas en la contienda, organización de elecciones periódicas e instituciones sólidas. (Baja)

+ Politización del ejército: debido al creciente rol en la Administración, participando en labores civiles, las fuerzas armadas podrían adquirir un papel de politización y jugar políticamente en la elección. (Baja.)

+ Resultados postelectorales que mermen la estabilidad política y los mercados financieros: en caso de que Morena pierda la elección, López Obrador desconocería los resultados y descalificaría a las autoridades electorales y llamaría a la movilización social. (Baja.)

CUIDADO CON LA INFORMACIÓN

El “Informe de Riesgos Globales 2024” del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), señala que México se ubica entre los países que están expuestos a la presencia de información errónea y desinformación en su proceso electoral, lo cual podría desestabilizar “gravemente” la situación real y la legitimidad de los gobiernos electos.

“Los recientes avances tecnológicos han mejorado el volumen, alcance y eficacia de la información falsificada, con flujos más difíciles de rastrear, atribuir y controlar. La capacidad de las empresas de redes sociales para garantizar la integridad de la plataforma, probablemente se vea abrumada frente a múltiples campañas superpuestas”, expone el WEF en sus posibles escenarios.

También hace énfasis en que la desinformación igualmente será cada vez más personalizada a sus destinatarios y dirigida a grupos específicos, como las comunidades minoritarias, y será difundida a través de mensajes cada vez más opacos desde las plataformas menos rastreables, como es el caso de la mensajería instantánea

Otro aspecto que se destaca es que la diferencia entre el contenido generado por Inteligencia Artificial (IA) y por humanos es cada vez más difícil de entender y discernir, no sólo para las personas con alfabetización digital, sino también para los mecanismos de detección.

“Por ejemplo, un video de campaña generado por IA podría influir en los votantes y alimentar protestas, o en escenarios más extremos, conducir a la violencia o la radicalización, incluso si lleva una advertencia por parte de la plataforma en la que se comparte que es contenido fabricado”, indica.

24 personajes a seguir en 2024; elecciones 2024: los escenarios y desafíos de México

Sigue la información sobre los negocios y la actualidad en Forbes México

¿Te gusta informarte por Google News? Sigue nuestro Showcase para tener las mejores historias

 

Siguientes artículos

24 personajes a seguir en 2024; la economía mexicana: entre la inflación y la recesión
Por

Presentamos a los personajes que liderarán la conversación en este 2024, ya que serán decisivos para hacer frente a los...

También te puede interesar