La difícil carrera contrarreloj en la que buena parte de países y organizaciones buscan revertir los efectos del cambio climático y disminuir las emisiones contaminantes tiene en las empresas a uno de los principales portadores de la estafeta. Al menos así lo han entendido y lo reconocen firmas como Braskem Idesa.

La empresa, creada a través de la asociación de Braskem (Brasil) y Grupo Idesa (México), no ve la sostenibilidad como un concepto en tendencia, sino como un elemento inherente a su ADN desde su fundación.

Como un gigante de la producción de polietileno en México, Braskem Idesa se ha propuesto un compromiso más que ambicioso en términos de sostenibilidad: neutralizar sus emisiones de CO2 para el 2050.

El reto no es menor, pues se suma a otras acciones de responsabilidad social que son parte del día a día de la compañía, como el fortalecimiento de la Economía Circular, a través de la integración de residuos plásticos a la cadena de valor y poder reducir el uso de materiales vírgenes.

“A nivel global Braskem, ha implementado 123 proyectos sobre Economía Circular, con una plantilla de más de 40 profesionales dedicados exclusivamente a la investigación sobre esta área”, destacó la firma.

En este sentido, el objetivo marcado para 2030 es evitar que 1.5 millones de toneladas de residuos plásticos sean enviados a incineración o tiraderos.

La estrategia en términos de responsabilidad empresarial impulsa modelos que impactan en cada fase del negocio y se ligan de forma directa con el compromiso medioambiental, pues incluyen salud y seguridad, resultados financieros y económicos, eliminación de residuos plásticos, combate al cambio climático, ecoeficiencia operacional y responsabilidad social y derechos humanos, así como innovación sostenible.

Crédito: Cortesía Braskem Idesa
Crédito: cortesía Braskem Idesa

Esfuerzo integral

Concebir un modelo de sustentabilidad con los alcances que le han permitido a Braskem Idesa reconocimientos como Empresa Socialmente Responsable (ESR), o certificaciones como el Índice de Sostenibilidad Empresarial (ISE) o EcoVadis en el caso de Braskem, tiene un impacto a una cadena de valor importante.

Por ello, no es extraño el dato que señala a Braskem Idesa como una empresa que ha beneficiado a 30 mil personas de las comunidades alrededor de sus instalaciones.

Braskem y Braskem Idesa son parte de la internacional Alliance to End Plastic Waste, cuyo objetivo es eliminar los desechos plásticos que llegan al medio ambiente.

La Economía Circular surge nuevamente como el concepto clave de esta estrategia, y esto se logra a través de alianzas de negocio que transforman el mercado de resinas plásticas.

Un ejemplo es el reciclado mecánico –en alianza con Alcamare–, con la que se ha logrado la producción de I’m Green Recycled, una resina con contenido reciclado post-consumo.

En el mismo tenor, Braskem lanzó, desde hace diez años, el primer plástico verde de producción masiva a nivel mundial: I’m Green™, realizado a partir de caña de azúcar, el cual hoy se comercializa en 51 países de cuatro continentes.

Así, la idea de encontrarse con un objetivo de neutralizar las emisiones de carbono para un lapso de 30 años no es una casualidad en el panorama de trabajo sustentable de Braskem Idesa.

De acuerdo con la empresa, será tiempo suficiente para sumar energías alternativas que viven un momento de desarrollo acelerado a nivel global, lapso que también será aprovechado para fomentar mayor conciencia sobre el impacto de las empresas que toman la iniciativa en el tema.

La sostenibilidad que para Braskem Idesa ha sido parte de su visión empresarial es hoy, más que nunca, una puerta de entrada hacia el futuro de la industria plástica a nivel mundial.

 

Siguientes artículos

Negocios comercios semaforo rojo Covid-19
Salud reporta 13,734 casos de Covid-19, nuevo récord para un día
Por

La Secretaría de Salud federal reportó un acumulado de 131,031 fallecimientos por Covid-19 en México.