En la antesala de las elecciones presidenciales y el cambio de gobierno, BBVA mejoró su estimado de crecimiento para la economía de México en 2024 de 1.8 a 2.6%; sin embargo, estima que el crecimiento promedio del Producto Interno Bruto (PIB) durante todo el sexenio sólo será del 1.1%.
Para el economista en jefe de la institución financiera, Carlos Serrano, ya se están notando los primeros impactos del nearshoring, por lo que, sumando el buen dinamismo del consumo, empleo e inversión, este 2023 el PIB aumentará 3.2%, por encima del 2.4% anterior.
“El mercado laboral continuará fuerte y eso debe ser significar que el consumo siga relativamente fuerte; esta tendencia de mayor de inversión, que creemos que empieza a ser muestra del nearshoring, va a continuar y de hecho nosotros creemos que vamos a ver los siguientes años mayores niveles de inversión”, afirmó.
Respecto al proceso electoral, Serrano descartó que vaya a afectar a la economía mexicana el próximo año, ya que las aparentes candidatas no podrían generar un desanclaje fiscal, tampoco se prevén volatilidades significativas por el cambio de gobierno.
“El crecimiento promedio (del sexenio de Andrés Manuel López Obrador) será de 1.1%, pero hay que tomar en cuenta que se atravesó la pandemia, que tuvo una contracción importante”, dijo durante la presentación del estudio “Situación México”.
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¿Llegó el fin del fenómeno del superpeso?
Luego de que el superpeso sorprendiera a más de uno y el tipo de cambio llegara a mínimos contra el dólar, BBVA consideró que la moneda mexicana ya tocó sus niveles más bajos y empezara su depreciación.
De acuerdo con Javier Amador, economista principal del banco, explicó que este cambio se debe a la perspectiva de que el Banco de México inicie un ciclo de bajadas antes que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos reduzca tasas y el diferencial se comience a comprimir.
“(Sobre) el tipo de cambio pensamos que los niveles más bajos ya quedaron atrás, estuvieron asociados principalmente al elevado diferencial de tasas de interés, que alcanzó en algún momento 625 puntos base, se redujo a 600, ahora está en 575”, detalló.
Amador dijo que todavía existe la posibilidad de una subida adicional por parte de la Fed y aunque no es su escenario base, si se llegara a materializarse se reduciría un poco más entre ambas instituciones, lo que impactará en el tipo de cambio.
De hecho, la institución financiera prevé que al cierre de 2023 el peso mexicano terminará en 18 pesos por dólar; mientras que para 2024 pronostica una depreciación de entre 4 y 5%, para ubicarse en alrededor de 18.80 pesos por dólar.
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