El eventual boom en la producción de vehículos eléctricos en América del Norte detonará el consumo del plástico industrial en México, afirmó Aldimir Torres Arenas, presidente de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac).
“Se espera que en 2026 represente el 10%, principalmente por los proyectos de industria automotriz para fabricar autos eléctricos en el país”, comentó el empresario.
La industria del plástico tendrá un crecimiento entre el 4 y el 6% en el consumo total en 2022: “Es un número positivo después de muchos años donde hubo crecimientos negativos”.
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Al cierre de 2022 se tendrá un consumo aparente de 5.9 millones de toneladas de resinas y serán producidas más de 3.8 millones de toneladas, que equivalen a 400 mil millones de dólares, explicó en conferencia de prensa.
De acuerdo con el presidente de la Anipac, el consumo de envases, empaques y embalajes que actualmente representa el 45% del consumo total de plásticos podría tener un crecimiento moderado del 2.8% en el periodo 2021-2026.
En este momento, las autopartes para el sector automotriz son el tercer segmento más importante de la industria del plástico, ya que representa el 8.5% del consumo total en México.
México es clave para la industria automotriz con operaciones en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), ya que es el proveedor del plástico industrial para fabricar automóviles, comentó Torres Arenas.
La economía mexicana ha recibido inversiones muy importantes en este último año y se espera continúe el arribo de capitales en 2023, comentó el presidente de Anipac.
“Hay empresas nuevas que llegaron a México, por ejemplo, la planta más importante de reciclaje de polipropileno en el Estado de México se hizo una inversión de 12 millones de dólares”, declaró.
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En 2021, la estadounidense Ford comenzó a producir en sus instalaciones de Cuautitlán, Estado de México, el modelo eléctrico Mustang Mach-E para el mercado mundial.
La planta fue sometida a una profunda transformación para incorporar nueva tecnología y equipamiento, principalmente en las secciones de estampado, carrocería, pintura y ensamblaje, y se brindaron las capacitaciones necesarias al personal.
“Además de este primer vehículo eléctrico, se ha anunciado que la compañía produciría en México otros dos nuevos modelos —uno para Ford y otro para Lincoln—, vehículos que estarían disponibles en el mercado durante 2023”, informó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En 2021, General Motors invirtió más de mil millones de dólares para adaptar la planta de Ramos Arizpe, en Coahuila. Primero se montan baterías y motores eléctricos y luego se fabricarán vehículos eléctricos a partir de 2023.
“En el marco de la ambiciosa estrategia de General Motors con miras a fortalecer su posición en el segmento eléctrico, la de Ramos Arizpe será la quinta planta destinada a fabricar vehículos eléctricos en América del Norte”, recuerda Cepal.
Las otras cuatro son las de Spring Hill, en Tennessee,así como Factory ZERO y Orion, en Míchigan, Estados Unidos, y CAMI en Ontario, Canadá.
La empresa alemana Volkswagen ha anunciado inversiones por 7 mil millones de dólares durante los próximos cinco años con miras a viabilizar la transición hacia la producción de vehículos de cero emisiones en los Estados Unidos.
“Ya se comienza a especular que la compañía tiene planes de actualizar otros complejos como los de Puebla y Silao, en México, para el ensamblaje de vehículos y componentes eléctricos, a mediados de la presente década”, añadió la Cepal.
Otros fabricantes con presencia en México, como la empresa japonesa Nissan y la alemana BMW, han realizado anuncios destinados a fortalecer a mediano plazo la capacidad de producir vehículos eléctricos en México.
A partir de 2027, BMW fabricará el SUV eléctrico iX3 y una versión de batería del modelo Serie 3 en su planta de San Luis Potosí, lo que le permitiría seguir avanzando en su objetivo de focalizarse en vehículos eléctricos.
Nissan anunció una inversión de 700 millones de dólares con el fin de preparar la planta de Aguascalientes para la fabricación de vehículos eléctricos.
La empresa china JAC que, en conjunto con inversionistas locales, ha creado las condiciones para ensamblar vehículos eléctricos en el país.
En la actualidad, JAC cuenta con cinco modelos destinados al mercado local mexicano, que se ensamblan en una planta en Ciudad Sahagún, Hidalgo.
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