La ubicación de México, su política industrial y la agenda sustentable de sectores como el del acero son factores que pueden impulsar el desarrollo del país en el contexto de la reubicación de las cadenas productivas globales, el llamado nearshoring, considera la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero).
¿Cómo podemos fortalecer la idea ante nuestros socios comerciales de que México y la industria mexicana son un complemento de desarrollo y no una amenaza en el proceso de cambio de dinámica de las cadenas globales de valor?, es una de las preguntas que viene planteando Canacero en eventos importantes, como sucedió en la pasada Asamblea General Ordinaria en Nuevo León.
Para los dirigentes del organismo, no se trata de un cuestionamiento menor, sino de uno que abre la oportunidad a México de llevar al país a una nueva era de desarrollo industrial, de la mano de industrias clave como la acerera, que genera 6.5 millones de empleos y es la catorceava más importante del mundo.
“Los cambios en la dinámica de las cadenas globales de valor y la transición hacia modelos regionalizados abren nuevas oportunidades para México, donde el acero se ubica en el centro de la discusión sobre el crecimiento de las cadenas de valor y las nuevas formas de producción de la industria manufacturera”, comenta David Gutiérrez Muguerza, presidente de Canacero.
Los directivos del organismo consideran que entre las fortalezas con las que el país cuenta para impulsar con éxito este proceso conocido también como friendshoring, por los lazos de confianza que renueva entre países socios del T-MEC, se encuentra el hecho de que la industria mexicana es promotora de la libre competencia que, a diferencia de economías centralizadas como la China, Corea o Turquía, busca generar condiciones equitativas para las empresas.
En este contexto, los representantes de Canacero hacen un llamado a revalorar la importancia del acero como una industria que no solo beneficia a México, sino también a su principal socio comercial, ya que cada tonelada de acero mexicano, tienen un alto valor de contenido estadounidense. “Nuestros países nos complementamos, generando más empleo regional y una mayor competitividad contra el resto del mundo”.
Sobre esto, los datos son contundentes: el sector siderúrgico genera 6.5 empleos indirectos por cada empleo directo; los trabajadores reciben salarios 71% más altos que otras industrias manufactureras, y por cada dólar generado en el sector, se obtienen 2.5 dólares en sectores relacionados, de acuerdo con datos de Canacero.
Para el cierre de año se estima que las exportaciones crezcan 24%, llegando a 5.1 millones de toneladas, mientras que la importación de productos de acero será de 11.7 millones de toneladas. Entre el acero importado directamente y el importado en forma de manufactura con alto contenido de acero, se tiene un potencial de aproximadamente 20 millones de toneladas.
Retos que vienen con la oportunidad del nearshoring
No obstante, el presidente de Canacero recuerda que si bien se tiene hoy un entorno favorecedor con el nearshoring, hay retos que no se pueden dejar de lado, como el hecho de que los grandes centros de consumo global entraron en un ciclo de contracción después de la recuperación poscovid, como consecuencia de la alta inflación, el aumento en las tasas de interés y los desequilibrios de mercado que ha generado la guerra entre Rusia y Ucrania.
Otro aspecto que ha tomado relevancia en este proceso de transformación empresarial es la sustentabilidad, como consecuencia del cambio climático que ya genera consecuencias; de ahí que, una vez más, la industria del acero represente para Canacero un andamiaje clave para transitar hacia economías más limpias.
“Consumir acero mexicano es parte de la solución en el combate contra el cambio climático, cada día nos esforzamos para tener operaciones más sustentables y nuestros resultados lo demuestran. En materia ambiental estamos a la vanguardia mundial, con 52% de nuestra producción basada en el reciclaje, y nuestra intensidad de emisiones de CO2 y consumo de energía es una tercera parte menor que el promedio mundial. Sin dejar de mencionar el tema hídrico, fundamental para las operaciones del sector, donde el 34% de nuestro suministro proviene del reúso”.
En tanto el nearshoring tiene lugar, la Canacero se ha comprometido a seguir trabajando en el fortalecimiento de la industria a través de acciones que lleva a cabo como la colaboración con autoridades para combatir la inseguridad, la promoción de la reciente política industrial, en el mecanismo de apoyo a pymes, la gestión de obra pública que contribuya con altos porcentajes de contenido nacional, una agenda legislativa y ambiental, así como en la defensa de prácticas ambientales de comercio.
“Ahora más que nunca es fundamental unirnos en una sola voz para fortalecer nuestras relaciones y colaboración con las autoridades desde una perspectiva sectorial, no individual y con una clara agenda de prioridades”, destaca David Gutiérrez Muguerza.
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