En los últimos años, ha habido un cambio significativo en la percepción pública sobre el cannabis y su grado de peligrosidad en comparación con otras sustancias. Una encuesta reciente realizada por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (APA) y Morning Consult revela que los estadounidenses consideran que el cannabis es menos adictivo que los cigarrillos, el alcohol y los opioides, e incluso menos adictivo que la tecnología.
La encuesta analizó la opinión de la población con respecto a seis sustancias diferentes, además de la tecnología, evaluando tanto los peligros como el nivel de adicción asociado a cada una de ellas. Sorprendentemente, solo el 38% de los encuestados consideraron a la cannabis con la siguiente respuesta “muy o algo insegura”, mientras que porcentajes mucho más altos fueron atribuidos a los cigarrillos (84%), el alcohol (64%), los opioides recetados (66%), los opioides sin receta (75%) y los vapeadores (76%). La única categoría que fue percibida como menos peligrosa que el cannabis fue la tecnología, con solo el 23% describiéndola como “muy o algo insegura”.
En cuanto a la adicción, el cannabis también fue considerado menos adictivo que las demás sustancias. Solo el 64% de los encuestados opinó que el cannabis puede ser adictivo, un porcentaje más bajo que el atribuido a los cigarrillos (87%), el alcohol (84%), los opioides recetados (83%), los opioides sin receta (74%), los vapeadores (81%) y la tecnología (75%).
Estos resultados ponen de manifiesto una clara discrepancia entre la percepción del cannabis y otras sustancias en términos de peligrosidad y adicción. Mientras que la opinión pública ha asimilado el mensaje de que los cigarrillos son peligrosos y adictivos, parece haber menos conciencia sobre los peligros asociados a otras sustancias como el alcohol y la tecnología.
El presidente de la APA, Petros Levounis, destaca la necesidad de transmitir información precisa sobre los peligros y tratamientos relacionados con distintos tipos de adicción. Se debe considerar que el vapeo puede ser tan adictivo como fumar cigarrillos y disparó la importancia de educar a la población sobre los tratamientos efectivos disponibles para los trastornos por uso de sustancias y las adicciones conductuales.
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Es alentador ver que una gran mayoría de los encuestados reconoce que la adicción es una condición médica (76%) y que los trastornos por uso de sustancias pueden tratarse (93%). Además, un porcentaje significativo (76%) cree que la adicción puede prevenirse. Estas cifras subrayan la importancia de promover una visión más compasiva y se basan en la evidencia sobre la adicción, alejándonos de la idea de que es simplemente una “debilidad personal”.
Sin embargo, a pesar de esta conciencia generalizada, la encuesta también reveló una brecha en el conocimiento sobre cómo abordar la adicción en la práctica.
Recientemente la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (APA) ha lanzado una iniciativa de concientización pública sobre la adicción y los trastornos por uso de sustancias como una respuesta crucial a la crisis que enfrenta nuestra sociedad. Con el objetivo de brindar información y apoyo a lo largo del año, esta iniciativa aborda diferentes aspectos de la adicción, comenzando con el vapeo este mes, seguido de los opioides en el verano, el alcohol en el invierno y la tecnología en la próxima primavera.
Es alentador ver que la mayoría de los adultos (71%) se siente informada sobre cómo ayudar si ellos mismos o alguien que conoce está luchando contra la adicción. Sin embargo, se reveló una brecha en el conocimiento sobre la seguridad de los opioides y el acceso a la naloxona o Narcan, un medicamento que salva vidas disponibles sin receta. Aunque el 58% de los adultos ha escuchado hablar de la naloxona o Narcan, solo el 35% sabe dónde encontrarlo en caso de una sobredosis de opioides.
Es importante abordar la crisis de los opioides, que ya cobró la vida de más de 100,000 personas en 2022. Es esencial que las comunidades estén informadas y puedan acceder a la naloxona. Esta iniciativa de concientización pública sobre la adicción es un paso significativo hacia la comprensión y la acción, cabe mencionar que el cannabis puede ser una solución a la crisis de opioides debido a sus múltiples usos medicinales, pero no solo las encuestas lo encuentran más seguro y menos adictivo, sino que también la evidencia científica respalda estas encuestas con miles de artículos publicados por instituciones reconocidas.
Por lo tanto, es importante destacar que el cambio en la percepción pública sobre el cannabis refleja una evolución más amplia en la forma en que se abordan las drogas y la adicción en la sociedad. La educación y la información precisa son fundamentales para fomentar una toma de decisiones consciente y responsable en torno al consumo de sustancias, así como para garantizar el acceso a tratamientos efectivos y el apoyo necesario para aquellos que luchan contra la adicción.
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