El sentido de pertenencia es trascendental cuando se viaja a una de las ciudades más cosmopolitas del orbe. La oportunidad de vivir como un local y, encima, disfrutar de la tranquilidad que produce saberse en el hogar, al estar lejos de casa, es parte del lujo que se experimenta en AKA Central Park.
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Los estudios, las suites de una y dos habitaciones, y los apartamentos cuentan con los servicios de un hotel de alta gama y las comodidades de una residencia, como espacio adicional y cocinas completamente equipadas. Las penthouse suites conmueven con lujosos pisos de madera noble, muebles excepcionales, un comedor acogedor y amplias áreas de estar.
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Inspirado en los museos legendarios y las maravillas arquitectónicas que se encuentran más allá de AKA Central Park, el diseño de cada alojamiento logra una magistral combinación entre estilo y funcionalidad.
Los 17 pisos del hotel residencial se elevan elegantemente sobre las calles de Manhattan y aportan una diversidad de panorámicas que asombra con la imponente presencia de los rascacielos y la energía de la Gran Manzana.
El sofisticado carácter de AKA permea en los muros de su lounge exclusivo para los huéspedes. Ambientado con luces cálidas, chimeneas y música, el lugar es perfecto para disfrutar de cócteles contemporáneos preparados por mixólogos experimentados, o de una cuidada selección de vinos naturales, cervezas y licores artesanales.
Con el ánimo de proveer otras experiencias gastronómicas, el servicio de conserjería de 24 horas tiene conexiones en toda la ciudad para obtener las mejores reservas en los restaurantes más espectaculares del barrio, como lo es Rainbow Room, situado en el piso 65 del 30 Rockefeller Plaza.
AKA Central Park tiene la fortuna de estar ubicado en un punto neurálgico de la urbe. Basta dar algunos pasos para encontrarse con el parque más grande e icónico de Nueva York, monumentos legendarios, instituciones de arte de clase mundial, como The Met y MoMA, y las boutiques insignia de la Quinta Avenida, incluidos Bergdorf Goodman, Louis Vuitton y más.
Ya sea que el huésped decida explorar la ciudad, mantenerse productivo o simplemente relajado en la tranquilidad de su suite, el complejo residencial ofrece una gama completa de comodidades y servicios que enriquecen la estadía.
Aquí destacan un gimnasio con equipos Technogym de última generación, que incluyen bicicletas elípticas, cintas para correr, bicicletas y escaladores con Cardio Theater. También una instalación de video panorámica de agua que fluye y escenas de naturaleza firmadas por la artista Monika Bravo, se proyectan en una pared de más de 18 metros, creando un ambiente visualmente estimulante.
El hotel residencial también pone a disposición de los viajeros su centro de negocios y conferencias, equipado con estaciones Mac, impresión láser, servicios de fotocopias y fax, además de televisor de pantalla plana. Todos, elementos necesarios para transitar del placer a los negocios.
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