Las llamadas “corcholatas” de Morena, es decir, los aspirantes a candidatos presidenciales, no habían necesitado renunciar o pedir licencia a sus cargos para recorrer el país y promocionarse, pues se han valido de pretextos, como presentar un libro, realizar conversatorios, conferencias magistrales o armar diálogos ciudadanos para acudir a los estados a que les griten ¡pre-si-dente! ¡pre-si-dente! o ¡pre-si-denta! ¡pre-si-denta!
Quien más ha viajado ha sido la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien tan solo en lo que va del año ha acudido, presencial o en videoconferencia, 38 veces a diferentes estados, lo que equivale a recorrer todo el país. Todo ello sin contar que también viajó a las entidades en los últimos meses de 2022.
Estos recorridos los ha hecho en fines de semana y con el argumento de ir a dar conversatorios o conferencias magistrales; algunos de estos encuentros llevan el nombre de “El Humanismo Mexicano y la Cuarta Transformación”, “Políticas de Gobierno en Beneficio del Pueblo”, “Políticas exitosas al servicio de la Ciudadanía”, y “Experiencias de gobierno que dan resultados”.
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En estos encuentros es común encontrar carteles y gritos de apoyo a Claudia Sheinbaum para la candidatura presidencial de Morena; en algunas ocasiones los gobernadores la acompañan y los asistentes visten de los colores de los partidos que la respaldan como el guinda o el verde.
La otra “corcholata” que también ha recorrido el país es el ex secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien ha acudido a 13 estados para presentar su libro El camino de México, o para encontrarse con la militancia de Morena y hasta para presentar programas de otras entidades.
Aunque ha tenido motivos para salir de la CDMX, la principal razón que utilizó para salir siendo funcionario fue la presentación de su libro.
En estos eventos que tuvo fuera de la Ciudad, en su mayoría no ha recibido apoyo ni compañía de los gobernadores como sí ha pasado con la jefa de Gobierno, Claudia Shienbaum.
También el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, utilizó la fórmula de Sheinbaum: decir que realizaría conversatorios llamados “Diálogos ciudadanos: Reforma electoral y gobernabilidad en México” y “Gobernabilidad en México”, como pretexto para recorrer el país. Tan sólo en lo que va del año ha visitado 12 estados.
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El 12 de enero, Adán Augusto López comenzó hacer giras para hablar sobre la reforma electoral que impulsó Morena en el Congreso de la Unión. La primera entidad que visitó fue Veracruz, de ahí se fue a Puebla, Tlaxcala, Guerrero, Baja California, Durango y cuatros estados más.
A pesar de que estos encuentros eran sobre la reforma electoral, el secretario aprovechó para hablar sobre la unidad de Morena, continuar con la Cuarta Transformación y aludir sobre sus intenciones de ser el próximo presidente.
“El presidente de la República que se había comprometido a la construcción de una planta desalinizadora que garantice el abasto de agua. Ya es una realidad, ya inició la construcción que debe estar terminada el año próximo año. Ya no le va a tocar a Andrés Manuel López Obrador venir a inaugurar la planta; ya van a ver a quién le va a tocar acompañar a Víctor (Manuel Castro)”, dijo el 13 de mayo al visitar Baja California Sur.
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El senador Ricardo Monreal es quien ha realizado menos recorridos por las entidades federativas. En su lista están Baja California, Guerrero, Puebla, Veracruz, Oaxaca, Michoacán, Zacatecas, Tlaxcala y la CDMX.
Los motivos son la presentación de su libro El acceso de las mujeres a la justicia, participar en foros, reuniones con ciudadanos y hasta encuentros con simpatizantes de Morena.
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