Microsoft confirmó el cierre de su unidad finlandesa de teléfonos móviles y el recorte de 1,350 empleos en el país nórdico, medida que anunció en mayo pasado como parte de su plan para racionalizar sus negocios de hardware en smartphones. La compañía había señalado que algunos de los empleados involucrados tendrían la oportunidad de trasladarse a las oficinas de la compañía en Redmond, en Estados Unidos, o a otras unidades de la compañía en Finlandia; sin embargo, no se mencionó si esto se llevará a cabo. Otros 500 empleados saldrían de nómina en el corto plazo, ya que en su estimación de mayo, la empresa tecnológica había señalado un total de 1,850 despidos. El plan de despidos de Microsoft generó nerviosismo en Finlandia después de que fuera dado a conocer, e incluso algunos políticos finlandeses acusaron a la compañía de incumplir sus promesas, ya que había prometido contratar a unos 5,000 antiguos trabajadores de Nokia, luego de comprar los negocios de telefonía de la mayor compañía finlandesa.

 

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