ONU ajusta previsión de crecimiento mundial a 2.8%
La organización modificó sus expectativas de crecimiento ante la pérdida de dinamismo que presentan tanto las economías en desarrollo y las emergentes.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ajustó su proyección de crecimiento para este año de la economía mundial a 2.8% desde 3%, previsto con anterioridad.
Lo anterior ante la pérdida de dinamismo que presentan tanto las economías en desarrollo y las emergentes.
En un informe titulado “Situación y perspectivas de la economía mundial 2014”, el organismo indicó que pese a que el crecimiento estimado en 2014 apunta a ser mayor que en 2013, cuando fue de 2.2%, los niveles de expansión no alcanzán los registrados antes de la recesión de 2008.
“Más de cinco años después de la crisis financiera, el mundo aún batalla para echar a andar de nuevo la máquina económica mundial a plena capacidad”, declaró Pingfan Hong, director de la Unidad de monitoreo de la economía global del Departamento de la ONU para Asuntos Políticos y Sociales.
Para la ONU los principales riesgos para la economía mundial radican en los impactos de los ajustes de las políticas monetarias en las economías desarrolladas; la vulnerabilidad de los países emergentes; remanentes de fragilidad en la zona euro y finanzas públicas insostenibles para muchas naciones desarrolladas.
También resaltó las tensiones geopolíticas y apuntó que la crisis en Ucrania y las tensiones políticas asociadas a ésta causaron un ajuste a la baja de 1.7% en las economías en transición (Rusia, a repúblicas ex-soviéticas y al sureste de Europa).
La ONU señaló en el documento que “el crecimiento económico en México y América Central se está fortaleciendo, beneficiándose del aumento en la actividad en Estados Unidos”.
En cuanto al empleo indicó que el crecimiento de 1.4% que éste registró en 2013 se mantiene por debajo del 1.7% anual que se presentaba antes de la recesión de 2008.
Respecto a los flujos comerciales, la ONU espera que éstos crezcan alrededor de 4.1% durante el 2014, una tasa que casi duplicará la del año anterior, pero aún por debajo de la expansión comercial previa a la crisis global.