La pandemia ha acelerado la adopción digital en el país. Gran parte de la vida pasó, de un momento a otro, al espacio digital: desde las compras, hasta la educación, el trabajo y las reuniones. Tan solo, en comparación con 2019, los mexicanos incrementaron el uso de Internet en 2020 para realizar operaciones de banca en línea (16.8 a 21.7%), y para la compra de productos o servicios (22.1% a 27.7%).

Pareciera que México lo ha hecho bien. Pero si miráramos detenidamente, ¿con qué nos encontraríamos?

Recientemente, el Instituto para el Desarrollo Gerencial (IMD) dio a conocer su ranking mundial de competitividad digital 2020, en el que mide la capacidad y disposición de 63 economías para adoptar y explorar tecnologías digitales como un motor clave para la transformación económica de sus empresas, gobierno y sociedad en general.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

De acuerdo con el ranking, las economías expertas en impulsar el talento digital, los marcos regulatorios efectivos y la rápida adopción de nuevas tecnologías fueron las que encabezaron la lista. Aquellas que no, por el contrario, se encuentran en los últimos lugares, como es el caso de México.

A nivel general, México se encuentra en la posición 54 de 63 países, siendo que de 2019 a 2020 cayó cinco lugares. El ranking cuenta con tres índices: Conocimiento, Tecnología y Preparación para el Futuro, y Tecnología es el peor calificado: México se encuentra en la posición 56 y, desde 2018 bajó 10 posiciones.

Sobre la apertura del gobierno que permita la adopción y exploración de las tecnologías, México tiene mucho por delante para lograr una verdadera transformación digital. El índice de Tecnología contempla tres subíndices para determinarlo: Marcos Regulatorios, Capital y Marco Tecnológico. En los tres subíndices ha caído México, pero es preocupante especialmente en el primero.

Sigue la información sobre los negocios y la actualidad en Forbes México

En un año complicado para la economía mexicana y en un año en el que muchos mexicanos tuvieron que emprender o mover sus negocios al mundo digital, México aparece como una de las economías peor calificadas en cuanto a Marcos Regulatorios para la adopción de la tecnología. La facilidad para iniciar una empresa, el cumplimiento de contratos, el desarrollo y la aplicación de tecnología, entre otros, fueron evaluados y la conclusión es que México tiene mucho que trabajar.

Sin ir más lejos, la regulación emitida en 2020 por el Banco de México (Banxico) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) que obliga a adoptar un esquema multiproveedor (de almacenamiento local y en la nube) a las Instituciones Financieras de Pago Electrónico, es uno de los ejemplos de lo que una nación no debe hacer si quiere ser competitiva digitalmente.

Dicha regulación impactaría negativamente tanto al comercio digital como a la banca en línea, pues implica una barrera por la complejidad operativa y los costos de tener centros de datos en un servidor local y en la nube de forma simultánea. Aquí, los emprendedores y las PyMEs salen perdiendo frente a los bancos tradicionales.

Sigue la información de los negocios en nuestra sección especializada

Sobra decir que los requerimientos de residencia de datos parten de mitos sobre riesgos asociados a los servicios en la nube. Tales mitos se sustentan bajo argumentos de “seguridad nacional”. Sin embargo, la seguridad de los datos de los usuarios no depende del lugar donde se almacenen geográficamente, sino de los sistemas, prácticas de seguridad y planes de contingencia. Por tanto, obligar a las empresas a almacenar datos localmente no los hace más seguros y privados.

La Asociación Latinoamericana de Internet (ALAI) ha resaltado constantemente el efecto nocivo que tendría sobre los emprendedores fintech en México. También, el Congreso de los Estados Unidos hizo lo propio al expresar que la regulación va en contra de la letra de los capítulos de comercio digital (capítulo 19) y servicios financieros (capítulo 17) del T-MEC.

Este índice de competitividad digital no es sólo un número. Los lugares que ha perdido México, sobre todo en el último año, reflejan que el país no esta preparado digitalmente al no aceptar y adoptar la tecnología en favor de sus habitantes; en gran parte, debido a la imposición de regulaciones arbitrarias y discriminatorias. En un periodo clave como el que estamos viviendo a causa de la pandemia, México no se puede dar tal lujo. Una mejora regulatoria en este aspecto incidirá directamente en su velocidad de recuperación.

Suscríbete a Forbes México 

Sissi de la Peña, Gerente de Comercio Digital de ALAI*

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Consulta Popular
Los aprendizajes y el ganador de la consulta popular
Por

El problema no era llegar al 40% requerido para generar vínculo, sino que en realidad, si la pregunta hubiera sido la qu...