El sindicato United Auto Workers y Stellantis, matriz de Chrysler, se disponen a reanudar las negociaciones el lunes por la mañana, cuando la huelga contra las tres automotrices de Detroit entra en su cuarto día.

Los negociadores sindicales y los representantes de General Motors, Ford y Stellantis mantuvieron conversaciones durante el fin de semana en un intento de poner fin a una de las acciones sindicales más ambiciosas de Estados Unidos en décadas.

La movilización coordinada, en la que el sindicato ha hecho huelga en las tres automotrices simultáneamente por primera vez, se produce en un momento en el que la aprobación de los sindicatos entre los estadounidenses se encuentra en su punto más alto en décadas, incluso cuando la afiliación a ellos ha descendido durante años y recientemente se mantiene prácticamente sin cambios.

Unos 12,700 trabajadores de la UAW están en huelga como parte de una acción laboral que afecta a tres plantas de montaje estadounidenses -una en cada uno de los Tres de Detroit- después de que expiraron los anteriores acuerdos laborales de cuatro años. Analistas y ejecutivos del sector se preguntan cuánto tiempo pasará antes de que la UAW haga huelga en otras plantas para aumentar la presión sobre las automotrices.

El presidente de la UAW, Shawn Fain, dijo el lunes a NPR que se habían producido “conversaciones mínimas durante el fin de semana, por lo que la pelota está en el lado de las empresas (…) Nos queda un largo camino por recorrer”.

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Sindicato automotriz UAW reanudará las negociaciones con Stellantis este lunes

Dijo que la UAW está dispuesta a hacer lo que sea necesario cuando se le preguntó si extendería la huelga a otras plantas esta semana.

Las huelgas han paralizado la producción en plantas de Michigan, Ohio y Misuri que fabrican el Ford Bronco, el Jeep Wrangler y el Chevrolet Colorado, junto con otros modelos populares.

Los analistas esperan que las plantas que fabrican camionetas más rentables, como la F-150 de Ford, la Chevy Silverado de GM y la Ram de Stellantis, sean los próximos objetivos de la huelga si ésta continúa.

Las tres automotrices han propuesto aumentos del 20% a lo largo de los cuatro años y medio de vigencia de los acuerdos propuestos, aunque eso es sólo la mitad de lo que exige la UAW hasta 2027. En un momento de las negociaciones, la UAW ofreció rebajar sus exigencias al 36%.

Además de salarios más altos, la UAW también exige semanas de trabajo más cortas, el restablecimiento de las pensiones con prestaciones definidas y una mayor seguridad laboral a medida que las automotrices hacen el cambio a vehículos eléctricos.

Con información de EFE.

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