A mediados de abril, el peso puso a prueba su fortaleza con el escalamiento en las tensiones de Oriente Medio. Un ataque de Israel a Irán provocó gran incertidumbre en los mercados y depreció a la moneda mexicana hasta 6.8% en cuestión de horas, lo que nos hizo reflexionar sobre la volatilidad a la que podría estar expuesto el denominado superpeso si se materializaran mayores eventos de riesgo.

En este texto te explicaré brevemente sobre los antecedentes, efectos, beneficios y potenciales riesgos para la moneda mexicana. 

El nacimiento de un ‘superhéroe

En los últimos años hemos presenciado un fenómeno que reta la concepción que tenemos como país en vías de desarrollo o país emergente sobre nuestra moneda: un peso mexicano apreciándose contra el dólar americano. 

Dicho fenómeno para la mayoría de la población puede ser tan atípico como un eclipse solar, ver nieve en la Ciudad de México o que el Cruz Azul gane una copa libertadores. Y, aunque es algo que de manera general podemos catalogar como positivo, debemos entender que no necesariamente durará para siempre y un retroceso puede venir acompañado de volatilidad en los mercados financieros.

México, país con una población cercana a los 130 millones de personas, paisajes paradisiacos, una flora y fauna tan impresionante que cualquier científico, fotógrafo o turista tendría un gran gusto por venir a presenciarlo, nación que en 1993 adopta a los nuevos pesos, o de acuerdo con la ISO 4217 el MXN. 

Recordemos que, de acuerdo con esta norma, las monedas se identificarán por un código de tres letras, las dos primeras harán referencia al país de origen (MX = México), y la tercera será la inicial de la moneda (N = Nuevo Peso Mexicano). 

Asimismo, los cruces de divisas se identifican por una expresión de seis letras, por ejemplo, el tipo de cambio del peso con respecto al dólar americano es USDMXN. Tomamos principalmente esta moneda como referencia por dos razones principales: cercanía geográfica, lo que nos convierte en grandes aliados comerciales, y que el dólar es la moneda más negociada a nivel global.

El peso mexicano ha sufrido una larga historia de devaluaciones y depreciaciones, por lo que en la cultura mexicana siempre estaremos acostumbrados a escuchar sobre la pérdida de valor de nuestra moneda frente al dólar americano. 

Comprendiendo lo anterior, el hecho de que el peso mexicano haya ganado terreno frente al dólar americano en más de 30% en los últimos cuatro años, lo convierte en un verdadero caso de estudio para economistas, académicos y uno que otro político. 

En +Dinero puedes resolver tus dudas sobre finanzas, inversiones y más, mira: Para invertir necesitas mucho dinero: la verdad detrás del mito

El caballero de Latam asciende

Esta apreciación se da en condiciones muy específicas, así que lo desmenuzaré en las principales causas.

Altas tasas de interés. En una entrega anterior abordé las tasas de interés, su repercusión en la economía y los sectores que son afectados por una variación en el costo del dinero, el tipo de cambio entre ellos. De tal manera que cuando se requirió disminuir la presión inflacionaria que invadió el mundo entero entrada la pandemia, se hizo necesario aumentar las tasas de interés para frenar el consumo y la presión en los precios. 

Para más detalles lee: Tasas de interés: qué son, cómo interpretarlas y aprovecharlas

La tasa de interés objetivo de Banco de México alcanzó 11.25%, mientras que la de la Reserva Federal estadounidense se ubicaba en un rango de 5.25% a 5.50%, situación que para los inversionistas comenzó a generar atracción de sus capitales hacia los instrumentos mexicanos. 

Inflación en desaceleración. La inflación es lo que hace que el poder adquisitivo se vea afectado a través del tiempo, una manera de saber si las inversiones que realizamos nos ayudan a conservar el poder adquisitivo es a través de la tasa real o también conocida como tasa deflactada. Esta tasa es resultante de descontar la inflación a la tasa de interés que recibimos en las inversiones, factor que también era más atractivo para los inversionistas en México, incluso sobre sus pares latinoamericanos. 

Nearshoring. Término de reciente adopción que consiste en una fuerte atracción de inversión y altas expectativas de crecimiento por la cercanía con Estados Unidos, posicionando al país como un alto referente para la atracción de industrias enfocadas en la innovación, el desarrollo y la búsqueda de mano de obra especializada donde empresas de renombre internacional han visto en México un país estratégico que permite atender operaciones hacia el continente americano, pero en específico hacia Estados Unidos, con lo que podemos observar grandes flujos entrantes de dólares para materializar el recibimiento de estas empresas. 

Ojo aquí: México debe hacer ajustes para que el nearshoring se convierta en oportunidades reales: expertos

Factor técnico de las posiciones especulativas en Chicago. Las posiciones de los operadores en el mercado de futuros se han incrementado del lado de la moneda local, llegando hasta 139,691 contratos a favor del peso mexicano, niveles no vistos desde el inicio de la pandemia por Covid-19. Recordemos que cada contrato ampara el equivalente a 500 mil pesos. 

Prudencia fiscal. Uno de los grandes aciertos nacionales a ojos de los inversionistas extranjeros es la manera en la que el gobierno mexicano ha empleado los recursos, generando importantes ahorros e incentivando la creación de obras estratégicas, hecho que ha generado confianza a nivel global; esto, aunado a los cuatro anteriores factores, ha permitido tener un gran desempeño a nuestra moneda. 

Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad

Si bien el excelente desempeño que ha tenido nuestra divisa es digno de estudiarse, el ser la segunda moneda emergente más negociada (después del yuan) conlleva diversas oportunidades y riesgos que considerar en adelante. 

Una moneda fuerte brinda la oportunidad de importar talento, maquinaria e infraestructura con el fin de aprovechar el momentum positivo y darle un impulso adicional al país y la moneda en su conjunto. De manera más sencilla, el estar como dicen los norteños “echao pa delante”, puede ser aprovechado para obtener mejores resultados a futuro.

Aunque no todo es miel sobre hojuelas, el hecho de ser una moneda con alta liquidez suele potenciar los flujos de oferta y demanda de pesos, lo que en periodos de alta incertidumbre y miedo por parte de los inversionistas pueden depreciar fuertemente a la moneda local en búsqueda del llamado flight to quality, es decir, demanda de activos refugio como oro, bonos del tesoro americano o dólares. 

Pudimos observar movimientos de este tipo cuando se dio el referéndum del Brexit (donde el peso mexicano se deprecio 7.8% en un día), la victoria de Donald Trump en las elecciones de 2016 en Estados Unidos (donde la depreciación alcanzó el 14.4%) y dentro de las más relevantes, el inicio de la pandemia por Covid-19 donde en cuestión de semanas el tipo de cambio se depreció encima del 35%.

Así que, recuerda, si tu negocio y actividades dependen de la exposición al tipo de cambio, existen instrumentos financieros que pueden ayudarte a lidiar con la volatilidad y estabilizar tus flujos a lo largo del tiempo. Desde luego, necesitarás la asesoría de los especialistas en la materia, pon tu patrimonio en profesionales que te puedan dar las mejores herramientas disponibles.  

*Juan Carlos Cruz Tapia es catedrático de licenciaturas y licenciaturas ejecutivas en la Escuela Bancaria y Comercial.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

 

Siguientes artículos

migrantes RFC
10 datos sobre la recaudación vía la declaración anual de personas físicas
Por

¿Sabías que 775 mil mdp se devolvieron a los contribuyentes el año pasado? Recuerda que el 30 de abril es el último día...