En noviembre del año pasado, Aduanas y Protección Fronteriza interceptaron un paquete en ruta desde Illinois a Israel. Contenía un George Foreman Grill, bastante inofensivo. Pero cuando los agentes sometieron el artículo a rayos X y lo abrieron, encontraron cañones de rifle envueltos en papel de aluminio y un Apple AirTag.

Cuando Apple lanzó los dispositivos de seguimiento de ubicación del tamaño de una moneda de diez centavos en 2021, se presentaron como una pieza de tecnología barata para ayudarlo a controlar sus pertenencias, como equipaje, llaves y billeteras. Pero los delincuentes, sobre todo los acosadores, también han utilizado AirTags y dispositivos similares como Tile.

Ahora, los inspectores de la CBP afirman haber encontrado evidencia de otro uso ilícito de los AirTags: ayudar a los contrabandistas de armas ilegales a controlar sus envíos, según una orden de registro para una cuenta iCloud de Apple vinculada a los rastreadores que obtuvo Forbes.

Los traficantes de drogas y armas han utilizado durante mucho tiempo rastreadores GPS para controlar los envíos, ya sea para asegurarse de que lleguen a su destino o para detectar cuándo se pierden. Pero si bien los rastreadores más antiguos han demostrado ser voluminosos y poco confiables, el AirTag de Apple es pequeño, liviano y eficiente.

“Al igual que los traficantes de drogas, [los traficantes de armas] quieren asegurarse de que la policía u otra persona no desgarre la carga”, dijo Brady Wilkins, un investigador recientemente retirado en Arizona. “Si otro grupo lo toma o lo confiscan, pueden abandonarlo o saber que algo no está bien”.

Apple no respondió a las solicitudes de comentarios al momento de la publicación, pero ha estado intentando limitar los usos maliciosos de AirTag durante los últimos dos años. Una incorporación reciente es una función que advierte a los usuarios cuando se detecta un dispositivo de seguimiento desconocido, a través de Bluetooth, en su persona. “Condenamos en los términos más enérgicos posibles cualquier uso malicioso de nuestros productos”, escribió la empresa en un comunicado de prensa el año pasado.

Según la orden, la unidad de Investigaciones de Seguridad Nacional del DHS rastreó el envío del cañón del rifle hasta un hombre con sede en Palos, Illinois, Amin Betuni. Los registros que el gobierno dijo haber obtenido de un proveedor de armas en línea anónimo mostraban que Betuni había comprado varios cañones AR-15 y Glock. Los investigadores dijeron que CBP interceptó un paquete que contenía lo que parecían ser esas mismas partes, junto con la parrilla y un AirTag, en camino a un contacto en Jerusalén, Israel. La orden dice que la etiqueta de envío del paquete indicaba que fue enviado desde “Ameen Betuni” desde un terreno baldío junto a una propiedad propiedad del sospechoso.

Mientras tanto, la patrulla fronteriza en Israel informó haber interceptado un paquete diferente que contenía partes de armas también escondidas dentro de un George Foreman Grill y un AirTag al lado, según la orden. Ese paquete tenía una dirección de remitente de la residencia de Betuni, afirmó el DHS. Los funcionarios israelíes también confiscaron un envío adicional de FedEx que contenía otros componentes de armas que estaban ocultos dentro de piezas de automóviles, dijeron los investigadores. También se descubrió un AirTag en ese paquete.

Wilkins dijo que agregar una propiedad personal como dirección del remitente sería un error estúpido. “Los delincuentes también se vuelven complacientes”, añadió.

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DELINCUENTES SUPUESTAMENTE UTILIZAN APPLE AIRTAGS PARA RASTREAR ARMAS ILEGALES

A finales de diciembre, las fuerzas del orden allanaron la propiedad de Betuni, aunque él no estaba en casa. Sin embargo, los investigadores sospecharon que estaban siendo vigilados por cámaras de seguridad en su casa, ya que solo diez minutos después de que la policía ingresara a la residencia de Betuni, uno de sus dispositivos AirTag se desvinculó misteriosamente de su cuenta de iCloud, dijo el DHS.

Betuni fue arrestado en julio y ha sido acusado de enviar interruptores Glock ilegales, que efectivamente convierten una pistola en un arma automática, en los Estados Unidos. Sin embargo, aún no ha sido acusado de enviar aparatos de armas a Israel ni a ninguna otra nación. En una presentación reciente, el gobierno solicitó al tribunal una extensión del plazo para presentar una acusación, ya que continuaba investigando la conducta de Betuni. La solicitud fue concedida la semana pasada.

Otros involucrados en el presunto plan, pero cuyas identidades eran desconocidas para el gobierno, también estaban usando AirTags como parte de su operación para “contrabandear mercancías desde Estados Unidos”, escribió el agente en la orden. No se proporcionó más información sobre el uso más amplio de los dispositivos Apple.

El Departamento de Justicia se negó a comentar sobre el caso. El abogado de Betuni no respondió a las solicitudes de comentarios.

No son solo los delincuentes los que han encontrado usos para el AirTag: las fuerzas del orden también lo han hecho, incluso si va en contra de la política de Apple utilizar las herramientas para vigilancia subrepticia. En marzo, Forbes encontró una orden que detallaba el uso de un AirTag por parte de la DEA, después de que colocara uno de los dispositivos en una máquina a los agentes sospechosos se les ordenaba en línea fabricar narcóticos ilegales.

Este artículo fue publicado originalmente en Forbes US.

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